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| Análisis | Radiografía de la sanidad |

Cuando el DNI sí importa

Los castellanos y leoneses no creen en la igualdad total en la sanidad; hay quienes opinan que ciertas características y detalles pueden pesar a la hora de recibir atención médica

Publicado por
Beatriz S. Olandía
León

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redacción

Proceder del medio rural, venir de otra comunidad, ser mayor o contar con un determinado nivel de estudios puede determinar la atención sanitaria a recibir por parte del Sacyl, según algunos de los ciudadanos castellanos y leoneses. Muchos de los encuestados por el Ministerio de Sanidad no confían en la imparcialidad del sistema a la hora de ofrecer sus prestaciones a la población. Lo que se supone un servicio de todos y para todos parece no convencer a los propios ciudadanos.

Vivir en una pequeña población fuera del ámbito urbano, con un nivel social bajo y ser extranjero es, dede el punto de vista del propio usuario, el perfil de quien no recibirá un trato igual en lo sanitario a lo que podría recibir el español residente en una ciudad y con un nivel social alto.

El problema fundamental, y donde más reticencias se recogen en el barómetro , gira en torno al medio del que procede el enfermo. Los encuestados tiene la sensación de que residir en una zona rural o en una ciudad es determinante a la hora de acudir al médico. Casi la mitad de los encuestados declararon que la sanidad pública no presta los mismos servicios a todos los ciudadanos. Mientras, tan sólo un 42% cree en la imparcialidad del Sacyl a la hora de atender a sus pacientes.

La comunidad autónoma en la que se resida también puede ser determinante a la hora de disfrutar de la sanidad pública. El 37% de los consultados estima que los servicios que reciben los ciudadanos varían de unas autonomías a otras.

Y frente a las desigualdades, el género. Parece que las distinciones entre hombres y mujeres quedan al margen de las consultas médicas en la comunidad; nueve de cada diez castellanos y leoneses opinan que ser varón o mujer no tiene por qué suponer un motivo de discriminación en lo sanitario... aunque aquí quizás lo que realmente debe preocupar es ese 5% que señala que existen diferencias en el trato entre hombres y mujeres.

Pero las diferencias no terminan ahí; dos de cada diez castellanos y leoneses consideran que la sanidad en la comunidad es peor que en otros puntos de España, mientras que sólo el 7,7% ve a Castilla y León por encima del resto de autonomías. Tal vez por ello, el 87% de los consultados consideren que las comunidades deberían «ponerse de acuerdo para ofrecer a los ciudadanos unos servicios similares» y contar así con una oferta sanitaria lo más homogénea posible.

Puede que algunas de estas circunstancias hayan sido el motivo por el que el 20% de los usuarios del sistema sanitario de la comunidad haya pensado alguna vez poner una reclamación ante el Sacyl.