El ministro pide apoyo a las constructoras para financiar grandes obras
Blanco invita al gobierno Obama a conocer el AVE Madrid-Sevilla
Fomento pretende que empresas de España construyan obras del plan estadounidense
José Blanco, en la toma de posesión de los nuevos cargos de Fomento
j.d.a. | madrid
En tiempos de crisis cualquier ayuda es buena; y el Ministerio de Fomento, al que José Luis Rodríguez Zapatero ha situado como punta de lanza para crear empleo y riqueza, tiene por delante una labor titánica. El nuevo responsable del departamento, José Blanco, pidió este lunes colaboración financiera a las constructoras nacionales para sacar adelante las obras del Plan Estatal de Infraestructuras del Transporte (Peit). Las empresas recogen el guante, aunque reconocen que la actual dureza del mercado financiero hace difícil grandes desembolsos.
El Peit -”que, adelantó Blanco, se revisará este año-” contemplaba en origen que un 20% de los 250.000 millones de su presupuesto saldría de los bolsillos de los constructores, y otro 20% serían obras «público-privadas». Precisamente a estas últimas se refirió el ministro en su discurso durante la toma de posesión de los altos cargos de su gabinete. «Voy a estudiar con las empresas del sector fórmulas que estimulen la financiación compartida en la inversión de de infraestructuras para que siga siendo una palanca eficaz de lucha contra la crisis y dotar al país del capital físico que necesita», señaló.
La patronal de los constructores, Seopan, ya ofreció en su día a Magdalena Álvarez financiar una serie de proyectos. Un plan que, finalmente, no tuvo mayor desarrollo. Puede que ahora sea el momento. Ese salto a la colaboración, sin embargo, lleva inherente la necesidad de abrir el debate del pago por el uso de las infraestructuras. Un pago que no tiene porque ser a cargo de los usuarios, pues muchas de las fórmulas que hoy se manejan en Europa dejan esa responsabilidad en manos de las Administraciones.
Bienvenido Mr. Obama
El viernes, el Consejo de Ministros aprobará la creación en Fomento de una nueva secretaría general de Relaciones Institucionales. Departamento que servirá de punto de conexión con las empresas y para «potenciar la presencia de las constructoras en el extranjero», adelantó Blanco. Su primera misión será la de invitar a la Administración Obama a conocer las infraestructuras españolas, y en especial el AVE. Obama maneja un presupuesto de 800.000 millones de dólares para grandes obras y ya ha reconocido que el tren veloz entre Madrid y Sevilla, que este martes cumple 17 años en servicio, es un ejemplo a seguir. Las constructoras y las eléctricas nacionales, líderes mundiales en sus sectores, tienen mucho que ofrecer a Barak Obama. Y mucho que ganar. Fomento pretende ser una plataforma de expansión internacional, y ya trabaja con la embajada de Estados Unidos para que una delegación norteamericana visite España.