Camps asegura ante el Parlamento valenciano que siempre actuó «bajo la estricta legalidad»
valencia
«Siempre digo la verdad, no hay regalo alguno». Así de tajante fue el presidente de la Generalitat Valenciana, Francisco Camps, en la sesión de control del Parlamento autonómico, la séptima desde que hace tres meses saliera a la luz el caso Gürtel.
El presidente valenciano, que fue recibido en pie y con aplausos por parte de su grupo parlamentario durante un minuto, aseguró en tres ocasiones no tener ninguna relación con los responsables de las empresas vinculadas a esta supuesta trama de corrupción. «No hay ninguna relación entre los contratos de la Generalitat y las empresas de la trama del caso Gürtel». De hecho, dijo, «no hay nada de nada».
Camps insistió en que en todos los casos «se siguió el procedimiento administrativo previsto por la ley» y señaló que los contratos «están en un lugar en donde se sabrá que se aplicó el procedimiento administrativo sin ningún tipo de problema», además de encontrarse a disposición de la oposición, ya que «todo se ha hecho bajo el procedimiento estricto de la legalidad».
Sus explicaciones no contentaron a la oposición, que le reclamó «explicaciones» en las Cortes Valencianas.
El portavoz socialista, Ángel Luna, reprochó al presidente autonómico que haya «judicializado el caso conscientemente» porque «es más fácil estar en situación de imputado» que dar explicaciones en el Parlamento, ya que «es muy difícil conseguir una condena de cohecho».
«Yo he de ser fiel al juramento que di para cumplir con lo que cada institución requiere en cada instante», respondió Camps, «y se están diciendo las cosas donde corresponde», añadió en alusión a su comparecencia el miércoles ante el juez.