Libertad con cargos por tirar a la basura el brazo del «sin papeles»
El juez cree que no hay suficientes pruebas contra los dos hermanos propietarios de la panificadora de Gandía
Los dos hermanos responsables de la panificadora, a su salida del juzgado de Gandía.
Entraron libres y libres salieron del juzgado de Instrucción número 6 de Gandía (Valencia), pero con cargos. Los dos hermanos propietarios de la panificadora en la que el 28 de mayo un boliviano perdió su brazo izquierdo al intentar alcanzar un sobre de levadura que había caído en la máquina de amasar los ingredientes entraban al juzgado pasadas las 9.15 horas ocultos bajo unas gafas de sol y gorras, sin contestar a las preguntas de los periodistas que les esperaban en busca de novedades sobre el polémico incidente.
Su declaración comenzó a las 10.04 horas y después salían por la puerta con la tranquilidad de no dormir entre rejas, aunque el fiscal ha pedido que se les juzgue por delitos de riesgos laborales, lesiones consumadas y contratación ilegal. Pide para ellos una pena de seis a diez años de cárcel, por no respetar los derechos de los empleados, la seguridad y mucho menos el Estatuto de los Trabajadores.
El fiscal pedía con estos argumentos prisión provisional eludible bajo fianza de 100.000 euros, pero el juez no ha atendido a su petición. Comisiones Obreras, además, denuncia que uno de los hermanos Rovira dejó al boliviano a 200 metros del hospital y tiró el brazo a un contenedor de basura. Sin embargo, el juez considera que no hay suficientes pruebas para esta imputación.