Crónica | sagrario ortega
Y Salgado sirvió el cóctel
El ingrediente básico del nuevo modelo: el Estatuto de Cataluña
No ha sido fácil preparar el cóctel de la financiación. Demasiados ingredientes para mezclar en un coctelera que, a contrarreloj, la vicepresidenta económica del Gobierno, Elena Salgado, ha agitado y cuyo contenido ha servido en bandeja a las comunidades autónomas, aunque su sabor no ha gustado a todas.
Para preparar el cóctel, un ingrediente básico: el Estatuto de Cataluña. Una ley orgánica que imponía un sistema de financiación para esta comunidad y que, además, fijaba la fecha límite -”el 9 de agosto del pasado año-” para degustarlo.
Un cóctel no se elabora con un solo componente y el Gobierno y las comunidades entendieron que se debía acompañar de unas «gotitas» de revisión de la población, de un «toque» de incremento de los recursos para la atención de los servicios básicos, de una «medida» de otros estatutos reformados, de una «porción» de mayor corresponsabilidad fiscal, de la «guinda» del bilingüismo..... En cualquier cóctel que se precie no puede faltar la angostura, esa bebida amarga elaborada con la corteza de la planta del mismo nombre. En el que el Gobierno y las autonomías han tardado un año en preparar, el toque amargo lo ha puesto la crisis económica.