El PP se querella contra Chaves por favorecer a la empresa de su hija
Los populares presentan hoy su denuncia ante el Supremo por los delitos de prevaricación y tráfico de influencias
Tras intentar forzar, sin éxito, la comparecencia de Manuel Chaves en los parlamentos nacional y andaluz, el PP pretende ahora sentar en el banquillo de los acusados al vicepresidente tercero y ministro de Política Territorial por las decisiones que adoptó cuando presidía la Junta de Andalucía. El PP le acusa de prevaricación y tráfico de influencias en la concesión de una subvención de 10.093.472,7 euros a la empresa Minas de Aguas Teñidas (Matsan) para la que trabaja como gerente su hija Paula.
El partido opositor planteó ante el Tribunal Supremo una querella criminal contra el vicepresidente y «cualesquiera otras personas que en fase de instrucción aparezcan como coautoras, cómplices o encubridoras» de los delitos que le atribuye a Chaves.
La denuncia sostiene que el entonces presidente de la Junta de Andalucía prevaricó por la «arbitrariedad» de las decisiones que adoptó para la concesión del incentivo a la empresa minera a través de un expediente «plagado de irregularidades» y «sin el mínimo rigor» exigible a los funcionarios y autoridades públicas. De no haber sido así -”dice el escrito presentado ante el Supremo-” la solicitud no habría culminado con la aprobación de la subvención por el Consejo de Gobierno ya que la documentación y las propuestas de resolución aportadas «evidenciaban que la propuesta no se ajustaba a derecho».
A sabiendas. También atribuye al presidente autonómico el delito de prevaricación por incurrir en incompatibilidad dado que no se abstuvo en el trámite fundamental de la ratificación de la subvención en la sesión del Consejo de Gobierno» que le dio el visto bueno, aún a sabiendas de que su hija «era nada menos que la responsable del departamento jurídico de la empresa favorecida con dicha resolución y su representante ante la propia administración andaluza».
Además, el partido denunciante afirma que Chaves incurrió en tráfico de influencias a favor de su hija Paula «prevaliéndose de su condición de jefe del Ejecutivo andaluz» al actuar en las resoluciones que condujeron a la aprobación de la subvención.