El Rey: «Hay que darles en la cabeza y seguir hasta acabar con ellos»
El delegado del Gobierno en Baleares garantiza la seguridad de los monarcas, que concluyeron el viaje a Madeira, mientras las fuerzas de seguridad peinan Mallorca
Los Reyes llegaron el sábado por la tarde a Mallorca con todas las fuerzas de seguridad de la isla volcadas en la caza de los terroristas que el jueves pasado asesinaron a los guardias civiles Carlos Sáenz de Tejada y Diego Salva Lezaún y en la detección y desarticulación de la posible infraestructura con la que contaron los etarras para ejecutar su crimen. El delegado del Gobierno en Baleares, Ramón Socías, indicó que ni la posibilidad de que algún etarra pueda permanecer todavía en la isla ni el tremendo dispositivo antiterrorista que aún sigue en marcha en su búsqueda, que ocupa a más de un millar de agentes, afectarán en modo alguno a la seguridad de los Reyes durante sus vacaciones de agosto en Mallorca. Lo ocurrido, comentó Socías, «no cambia nada», porque la seguridad de la Familia Real «está garantizada».
De hecho, aunque ni Socías ni el Govern balear lo dijeron ayer de forma explícita, los responsables institucionales del archipiélago vivieron el sábado con gran alegría el aterrizaje en el aeropuerto militar de Son Sant Joan del avión que traía a los Reyes desde Madeira (Portugal) porque fue el mejor respaldo posible al mensaje que el presidente Francesc Antich quiere hacer llegar a todos los países y medios de comunicación europeos: «Mallorca es un lugar seguro para el turismo».
Si la máxima representación del Estado español y uno de los principales objetivos de ETA no encuentra motivo alguno para cambiar su agenda estival en la isla por el reciente doble asesinato, ocurrido en Palmanova, a menos de diez kilómetros de su residencia, el Palacio de Marivent, ningún particular tiene porque alterar sus planes de vacaciones en Baleares. El momento que simbolizará este mensaje se vivirá el próximo lunes, cuando Don Juan Carlos, rodeado de su familia, participe en la primera jornada de la Copa del Rey de vela, que como siempre partirá del club náutico de Palma de Mallorca.
A su llegada a Mallorca, don Juan Carlos ha asegurado a los periodistas no tener miedo y ha reconocido estar «encantado y segurísimo» en Mallorca. A la pregunta de cómo se plantea las vacaciones, el monarca ha respondido con un lacónico «ya veremos». No obstante, Don Juan Carlos se ha mostrado confiado y ha asegurado que «hay que darles en la cabeza y combatirlos hasta acabar con ellos».
Este domingo, la Reina y las infantas Elena y Cristina viajarán a Grecia para asistir al bautizo del cuarto hijo de Pablo de Grecia y Marie Chantal.