Entrevista
Casi 3.000 leoneses colaboran en el extranjero con Médicos Sin Fronteras
En León, al igual que en el resto de España, Médicos Sin Fronteras cerró el 2008 con un incremento de socios del 9% respecto al 2007. Por ello, María Díaz Martínez, portavoz de la organización, agradeció «aún más si cabe» la participación ya que en los últimos meses la preocupación por la economía ha estado muy presente en los hogares españoles».
Los socios y colaboradores (los primeros contribuyen con una cantidad fija al mes y los segundos a través de aportaciones puntuales) en León suman, a fecha de hoy, 2.700. Sin embargo, existen además personas que colaboran con la organización aportando su tiempo como voluntarios, esencialmente en actos de sensibilización en la calle, como exposiciones o mesas informativas.
Los miembros de MSF de León se coordinan a través de la Oficina Delegada para el Noroeste (que cubre, además, Galicia y Asturias) y ésta cuenta con cinco personas que realizan tareas voluntarias. De éstas, tres fueron mandadas al extranjero por Médicos Sin Fronteras en algún momento para desarrollar su labor profesional sobre el terreno con contrato.
Contribuciones en León. En el 2008, el 0,78% de los socios en España eran de León, y si se extrapola este porcentaje al volumen de ingresos procedente de los socios en toda España, que fue de 31,96 millones de euros, se deduce que los socios de MSF en León aportaron aproximadamente unos 250.000 euros a los fondos de la organización.
En cuanto a las aportaciones puntuales, éstas suman en León unos 75.000 euros. Además, a estos fondos privados podemos sumar la aportación realizada por Caja España en el 2008 que alcanzó los 25.000 euros. Colaboraciones muy importantes teniendo en cuenta que casi el 90% de los fondos de MSF España son de origen privado para tratar de garantizar la independencia de la organización.
Sin embargo, María Díaz lamenta que, a pesar de las cifras y de que hay tres expatriados de León que actuaron sobre el terreno, las actividades son mucho menores que en otras provincias. «El pasado año no conseguimos poner en marcha ninguna actividad, salvo alguna pequeña charla de un expatriado, una proyección de la película Invisibles o la asistencia a alguna feria de ONGD en Ponferrada», explica.
Como no hay sede en León, los voluntarios siempre han funcionado a distancia. El delegado hace visitas puntuales a los voluntarios y a las instituciones para organizar actividades.
Sedes. Además de la sede central en Barcelona, para conseguir llegar a toda la sociedad española, se crearon oficinas delegadas distribuidas por todo el territorio.
Actualmente, existen cinco oficinas delegadas y una de ellas es la que abarca Asturias, Galicia y León. Son zonas cercanas a las que la delegada puede llegar fácilmente. La delegación ha ido aumentando su número de actividades y su presencia en los medios de comunicación. Sin embargo, en palabras de María, «en León todavía queda mucho por hacer», ya que «poca gente conoce nuestra organización y lo que hacemos y es necesario organizar más actividades».
Requisitos para ser voluntario. Como explica María Díaz, para ser voluntario es imprescindible conocer los principios y la misión de la organización y compartirlos, es decir, es necesario que la persona se sienta identificada con la política operacional, la forma de actuar y los principios que sientan la base de la organización.
Al tratarse de una organización que trabaja en emergencias, la base de voluntariado en España quizás es menos amplia que en otras organizaciones aunque «realmente útil y necesaria». La principal función es difundir el trabajo de la organización mediante actividades programadas, participación en exposiciones, ferias, eventos..., así como en tareas de respaldo administrativo en las oficinas en España.
Debido a que no existe sede física en León, los voluntarios/as deben estar en contacto telefónico y vía email con la delegada (responsable de la delegación noroeste) para ir organizando actividades. Realmente, para la delegada es fundamental contar con apoyo, porque los voluntarios son los que están diariamente en León y conocen la realidad de la ciudad y de la provincia.
A estos requisitos para trabajar con MSF en un proyecto de Acción Humanitaria sobre el terreno se añaden algunas condiciones más, aunque el ser personal sanitario no es indispensable pese al nombre de la organización. En los proyectos también es necesario otro tipo de personal: psicólogos, politólogos, logistas, administradores...
También, es necesario pasar un proceso de selección y hablar algún idioma (además del castellano) es esencial.
Inicialmente el voluntario debe estar dispuesto a participar en un proyecto de entre 6 y 12 meses. Así, las intervenciones se desarrollan en contextos de alta inestabilidad o directamente de conflicto, por lo que los trabajadores internacionales salen a terreno con contrato y obviamente con un seguro que cubre los riesgos derivados de su labor.