López Garrido rechaza dimitir al entender que es «una acusación falsa»
El secretario de Estado para la UE está imputado por los delitos de prevaricación y malversación de fondos
El secretario de Estado para la Unión Europea, Diego López Garrido, aseguró ayer que no piensa dimitir pese a que la semana pasada un tribunal madrileño le imputase por los delitos de prevaricación y malversación de fondos porque entiende que se trata de «una acusación falsa» que no tiene «ninguna sustentación».
López Garrido, respaldado por la dirección nacional del PSOE y por el Gobierno, insistió ayer en que las ayudas que su departamento concedió a la Fundación Alternativas, y por las que el centro jurídico Tomás Moro le ha denunciado ante los tribunales, son «absolutamente legales» y que cuando las concedió hacía meses que ya no era patrono de este laboratorio de ideas cercano a los socialistas. La secretaria de Organización del PSOE, Leire Pajín, confió ayer en que el juez archivará pronto este proceso por ausencia de delito.
El PP, sin embargo, animó a López Garrido a presentar su dimisión. «Sería lógico, sería sensato y actuaría en bien de su país y también del Gobierno socialista si renunciara a su puesto para no perjudicar la Presidencia española de la UE», indicó ayer la secretaria general del partido, Dolores de Cospedal. La dirigente opositora reclamó a los socialistas que utilicen la «misma vara de medir» que con los imputados populares del caso Gürtel, a quienes se les exigió el cese nada más ser imputados.
De hecho, el PP no quiere dejar pasar este asunto y ha cambiado una de las preguntas que mañana iba a realizar en el Congreso, durante el pleno de control al Gobierno, para interrogar al ministro de Justicia por la imputación de López Garrido.