«Si hubiese datos alarmantes de maltrato, los tendríamos»

Las medidas puestas en marcha por la Junta están orientadas a la detección de los posibles casos de maltrato a las personas mayores. Hasta el momento, los pocos datos disponibles que maneja la Gerencia de Servicios Sociales no hacen sospechar de que el abuso de las personas mayores sea relevante en la comunidad.

-”¿Cuáles son los datos previos manejados por la Junta que han llevado a para poner en funcionamiento los programas de detección precoz y de asesoramiento para personas mayores?

-”No hay una situación especial en Castilla y León con respecto a España o el resto del mundo. A medida que la población tiene más edad podrían darse situaciones de maltrato desde muchos puntos de vista, como presiones psicológicas, problemas por vivir solos, por vivir con los hijos, por herencias. Hemos puesto en marcha varios programas y, entre ellos, el trabajo con los profesionales de la sanidad, tanto médicos como enfermeras y los servicios sociales, que son las personas con las que más trato tienen nuestros mayores. Ha habido jornadas de formación en todas las provincias para que los profesionales nos ayudaran a elaborar una guía para la detección de estos casos y actuar de forma rápida con programas de apoyo jurídico y apoyo psicológico. Cuando una persona se jubila necesita un apoyo para adaptarse a la nueva situación. La administración ofrece un servicio jurídico, gratuito y confidencial, si la persona afectada no se atreve a ir a un bufete de abogados.

-”El maltrato a las personas mayores es una realidad poco visible y difícil de detectar en todos los ámbitos, incluido el de las residencias ¿cómo se controla desde la Junta que el trato a las personas mayores es el adecuado?

-”El trato a las personas mayores en las residencias está garantizado por los profesionales de los servicios sociales. Los estudios que se hacen a nivel internacional están relacionados con el maltrato en el domicilio. El último estudio realizado este año por la Universidad de Valencia se centra en los domicilios y las relaciones con los hijos. En el caso de las residencias hay una normativa de funcionamiento muy estricta, se hacen seguimiento muy rigurosos, con un sistema de reclamaciones, pero casi no hay ninguna. Esta vigilancia se da tanto en las residencias públicas como privadas. Está todo muy controlado.

-”Las mujeres mayores son las que utilizan más el servicio de atención psicológica con consultas por depresión y problemas con la pareja...

-”Hay más mujeres mayores que hombres. La soledad causa más problemas de depresión en las mujeres que en los hombres. Pero también hay otro factor a tener en cuenta. Las parejas están menos tiempo juntas durante la vida activa y cuando llega la jubilación este tiempo en común aumenta, y es cuando surgen los problemas.

-”La Junta ha establecido este año zonas itinerantes de atención, como en Cistierna y Sabero, ¿se va a reforzar la asistencia en el medio rural?

-”Estamos trabajando en el medio rural en los centros de día y pueden solicitar el servicio jurídico y psicológico a través de un teléfono.

-”El Consejo General del Poder Judicial tampoco separa las denuncias por maltrato por edades ¿no tienen en Castilla y León ningún dato aproximativo o sospechas de la prevalencia de este delito en la comunidad?

-”No hay. Estamos en un momento en que actuamos para evitarlos. Si los profesionales sanitarios detectan un posible caso activan el protocolo que hemos establecido y lo derivan a los servicios sociales con apoyo piscológico y jurídico. Casi no hay datos de maltrato físico y los asuntos de las herencias se tramitan como letigiosidad de propiedad horizontal que están separados por edades. Para los juristas es un problema de propiedad horizontal no de maltrato a mayores. El sistema jurídico tiene sus propios códigos de funcionamiento.

-”Para la prevención de la violencia de género están unidas las administraciones, ¿hay planes de actuación en este sentido para prevenir el maltrato a los mayores?

-” En Castilla y León, de momento, no se da la circunstancia de tener problemas con el maltrato a mayores como para actuar de la misma manera que con la violencia de género. Hemos puesto los mecanismos para detectarlos y esperamos que no aumenten los casos. Si hiciera falta tomar otras iniciativas ahí estaremos. Hay que esperar a que pase un tiempo para hacer una evaluación. Si hubiera algún dato alarmante, lo tendríamos, sin duda.