La Iglesia desmiente que esté preparando una pastoral en contra de la Ley de Extanjería del PP
España no tiene técnicas para saber la edad de los inmigrantes que expulsa
La Administración carece de mecanismos fiables para determinar con garantías si los inmigrantes clandestinos que expulsa son menores de edad. Los técn
Los expertos del Grupo de Menores de CEAR, que durante doce meses han estudiado las técnicas empleadas en España para conocer real la edad de los supuestos menores, llegan a la conclusión de que los mecanismos utilizados son «obsoletos» y recuerdan que este no es un tema baladí, habida cuenta de que de este dictamen dependerá la suerte que corran estas personas. Los forenses y radiólogos revelan que en España sólo se utilizan técnicas de «determinación ósea» a través de una única radiografía de la mano y la muñeca izquierda, una prueba rápida y barata que, sin embargo, desde hace años los especialistas de todo el mundo ponen en cuarentena, ya que los márgenes de error pueden llegar a los dos años. Además, estos resultados se comparan con unas «muestras tipo» recogidas en los denominados «atlas de Greulich y Pile», unos viejos manuales de los años treinta que sólo se refieren a poblaciones de estadounidenses «descendientes de europeos, de raza blanca y procedentes de familias adineradas». Aunque los actuales avances médicos permiten determinar la edad por otros cinco procedimientos más exactos (radiografías panorámicas de la dentadura, placas de la cadera o resonancias, entre otros), los expertos denuncian que las autoridades españolas no completan sus estudios con estas otras técnicas, pese a que el procedimiento de la famosa radiografía de la muñeca supone «aplicar tests de varones caucásicos para determinar la edad de mujeres africanas subsaharianas». Según los autores del estudio, las pruebas que utilizan los médicos españoles no servirían siquiera para determinar con exactitud la edad de un norteamericano medio, ya que los «atlas» utilizados se refieren a poblaciones de hace más de 70 años. Pese a lo obsoleto del método, ni siquiera -denuncian los especialistas- se completan los informes con estudios sobre la aparición de vello o el desarrollo de los órganos sexuales, que son rápidos y baratos. Los procedimientos utilizados en España -aseguran los especialistas- «no permiten establecer con precisión la edad de un individuo, máxime si el estudio que se realiza se lleva a cabo en condiciones de urgencia y sin conocer determinados parámetros imprescindibles», como las diferencias de crecimiento y la distinta «maduración ósea», según la procedencia del individuo. «Muchos de estos niños llegan a los países europeos, entre ellos España, huyendo del horror de la guerra, de la explotación laboral, de la prostitución y del reclutamiento forzoso para solicitar asilo», recuerda la Comisión de Ayuda al Refugiado. Desmentido La Conferencia Episcopal, a través de un comunicado difundido ayer por su secretaría general, rechazó que esté preparando documento de cualquier tipo contrario a la reforma de la Ley de Extranjería anunciada por el Gobierno, en contra de lo interpretado por los medios de comunicación a raíz de unas declaraciones realizadas este sábado por la responsable de Inmigración del Episcopado, Pilar Samanes. El comunicado recuerda que el cauce de comunicación con los medios de la Conferencia Episcopal es su secretaría general y su oficina de prensa, e insiste en que «no es cierto» que esté preparando una pastoral sobre la hipotética reforma de la Ley de Extranjería, «tema que no ha sido estudiado en los últimos meses por ningún órgano» del Episcopado español. Otras fuentes de la curia precisaron que, si bien es cierto que no hay en marcha estudio de ningún tipo sobre una reforma de la Ley de Extranjería, el tema de la situación de los inmigrantes sí es objeto de análisis «constante» por parte de algunos órganos de la Conferencia Episcopal, en especial su área de Inmigración.