Esa señora tan adorable

Ahora que la gente aprovecha para pedir cosas, querría hacer una proposición a la nueva ministra de Sanidad: ¡cine argentino con receta, ya! Me dirán que este no es el lugar adecuado, pero yo lo dejo caer porsiaca . Allá ellos, porque se ahorrarían un pastón en las unidades de psiquiatría, psicología y «estados carenciales». Dejando a un lado el alegato, lo cierto es que Cleopatra demuestra de nuevo la inmejorable salud del cine ché. El éxito de público y crítica va para rato porque, menos presupuesto, tienen de todo: directores sensibles, guiones pulidos, actores monumentales y una rara habilidad para mantenernos entre la risa y la lágrima. Hace unos años, Eduardo Mignona puso a prueba nuestros pañuelos con Sol de otoño . Gracias a esta película muchos descubrimos a Norma Aleandro, que ahora repite en un papel hecho a su medida. Mignona la conoce bien, y sabe que pocas actrices como ella son capaces de concentrar toda la emoción en un gesto casi imperceptible, sostener planos eternos sobre una mirada o ganarnos la sonrisa con un brillo pícaro en los ojos. Y como ocurrió en El hijo de la novia , aquí nos ofrece un mano a mano con Héctor Alterio que ya de por sí justifica el ir al cine. Pero Aleandro y Alterio no son el único aliciente. El contrapunto lo ponen Leonardo Sbaraglia -valor seguro- y una sorprendente Natalia Oreiro. Con estos recursos sencillos pero eficaces Cleopatra acierta con este retrato agridulce de unas mujeres que tienen poco que ver con Thelma y Louise: sus problemas y contradicciones nos quedan muy cerca. CLEOPATRA: Argentina-Españ. Dir: Eduardo Mignona. Int: Norma Aleandro, Leonardo Sbaraglia. Dur: 100 min.