Entre el mito y la historia

Tras sus personales visiones biográficas de Kennedy, Nixon o Fidel Castro, Oliver Stone nos ofrece su particular retrato de Alejandro Magno. Sin evitar la polémica sino, como es habitual en él, sumergiéndose en ella, Stone muestra a un héroe torturado por sus traumas infantiles, psicológicos y amorosos. Colin Farrell, con una espantosa peluca rubia, interpreta al personaje protagonista con una ambigüedad sexual que ha levantado polémicas en EE.UU. o Grecia. La interpretación más destacada de la película es, sin embargo, la de Angelina Jolie, que interpreta a la madre del protagonista. La manipuladora Olympia de Jolie es una bella serpiente llena de ambición capaz de evocar en su hijo a Edipo. Precisamente, el inteligente uso de los mitos que hace Stone es uno de los aciertos de la película que sitúa a Alejandro entre la historia, la leyenda y el mito. Sin embargo, lo mejor de la película serían, por un lado, las dos impresionantes escenas de acción. Si ya en Platoon o en Nacido el Cuatro de Julio , Stone había dado buenas muestras de su manejo de las masas, en Alejandro Magno alcanza su cumbre en la sangrienta batalla de Gaugamela y en la espectacular y emotiva batalla india que incluye el enfrentamiento entre Bucéfalo y un elefante. Por otro lado, hay que aclamar el retorno de Vangelis a la música de cine de primer nivel. Siempre a la sombra de sus clásicos Carros de fuego o Blade Runner , Vangelis crea en Alejandro Magno una excelente y evocadora música que acompaña perfectamente a los sueños del joven Alejandro, a la magnífica Babilonia, a sus batallas o a su entrada en la inmortalidad a través de la historia, de la leyenda y del cine. «ALEJANDRO» Director: Oliver Stone. ntérpretes: Colin Farrell, Anjelina Jolie, Anthony Hopkins, Val Kilmer.