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A la sombra de La Musgaña
Hay regiones enteras que parecen -sólo parecen- estar al margen de la evolución de la música tradicional, de ese movimiento vital e imparable que en muchos lugares ha sabido rescatar la fuerza enorme de las raíces musicales autóctonas para ofrecérselas en todo su vigor a un público del siglo XXI. Esto ha ocurrido con entusiasmo y fecundos resultados en Galicia, Asturias, País Vasco, Cataluña, Valencia y Baleares; y va por buen camino en Cantabria, Aragón, Canarias y Murcia. Pero León, Navarra y Extremadura se muestran aún algo remisas a este movimiento, así como también las extensas tierras de Castilla (eso sí, siempre con honrosas y excelentes excepciones). El primer disco del grupo madrileño Hexacorde, Perpetuum mobile , viene a romper una lanza, refrescante y divertida, en favor del nuevo folk castellano. Apoyado sobre todo en la vigorosa sonoridad de la dulzaina, así como en arreglos cuidadosos que van hilvanando los ritmos tradicionales con las melodías modernas, Hexacorde abre un nuevo camino en el entendimiento del sonido de raíz como materia prima para la creación de temas sorprendentes, amenos, sugerentes y fiesteros. Además de la dulzaina, Hexacorde utiliza gaita charra y tamboril, flauta, pandereta, clarinete, cistro, guitarras, gaita gallega, piano, bajo, acordeón y percusiones: la mezcla, que recuerda inevitablemente a la tan recordada Musgaña, resulta equilibrada, un engranaje bien ajustado. Su repertorio incluye entradillas, agarrados, ruedas y jotas, entre otros bailes castellanos, así como unos titos de Vegamián leoneses y varias composiciones propias. Una delicia la dulzaina final en Propignan del Melyor y la mezcla de dulzaina y gaita en Rueda de la Ribera . «PERPETUUM MOBILE»: 2004. Grupo: Hexacorde. Distribuidora: Galileo MC. Precio: 12,90 euros.