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Unas gotas de humor porteño
Algún día habrá que preguntarse por qué el nuevo cine argentino parece tener más gancho en España que el que se hace aquí, y cómo es que todos los años aparecen en ese país directores debutantes capaces de contar historias con estilo, clase e interés junto a actores prodigiosoS. ¿Será cierto que el padecimiento de todo tipo de penurias aguza el ingenio? Por fortuna, productores avispados de aquí han decidido cruzar el charco y apostar por ellos, de modo que, aunque sea poniendo la plata, algo tenemos que ver en ese boom . El pionero en descubrir el filón del país sudamericano fue Gerardo Herrero, y ahora Antón Reixa ha decidido hacer lo propio. Filmanova ha apostado por Juan Taratuto y les ha salido el mejor trabajo de su aún breve trayectoria. La idea de partida debe mucho a Woody Allen, pero la copia es buena, tiene chispa; otros aquí (Armero, por ejemplo) llevan años intentando lo mismo y sólo han logrado dormir al personal. Diego Peretti sería el trasunto perfecto del neoyorquino, un antihéroe urbano y llorón, dispuesto a soportar el azote femenino para luego exponer reflexiones misóginas que aporta un guión al que sólo le sobran unas páginas: la historia pierde fuelle hacia el final, una vez se agota el repertorio de frases brillantes y situaciones ingeniosas. El protagonista es un médico al que su mujer abandona, justo cuando él creía que ambos se disponían a comenzar una nueva vida en común. Buenos Aires, metáfora de la decadencia de un país en quiebra, se cae en pedazos y con ella las esperanzas rotas del doctor. Todo triste, ácido, patético, si no fuera por el humor irreverente que transforma lo que podría ser un dramón en una comedia ágil, entretenida y fresca. «NO SOS VOS, SOY YO»: Dir: Juan Taratuto. Int: Diego Peretti, Soledad Villamil, Cecilia Dopazo. 105 minutos.