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Fotografía de Ryan Mcginley, que expone en el Laboratorio 987 del Musac

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Enrique Rueda - león
León

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A finales de la década de los noventa, fundamentalmente en Alemania, la fotografía avanza en función de una serie de valores: búsqueda de la objetividad, de lo impersonal y del distanciamiento con respecto a lo representado. Destaca la obra de Thomas Ruff, Andreas Gursky o Thomas Struth, que aplica estos conceptos a algunas imágenes de Nueva York que, si bien nada tienen que ver con las de Ryan Mcginley, sí sirven para comparar como se enfrentan ambos autores a un mismo universo de imágenes y de vivencias sobre la propia ciudad. Más cercano a planteamientos sociales, cerrando este círculo de artistas, estaría con sus enormes cibacromes, Jeff Wall. En el otro extremo podríamos situar la obra de artistas como Nan Goldin. La americana accede a través de su fotografía directamente a la realidad. A su realidad más cercana, cruda y terrible en ocasiones, donde incluso ella misma se retrata después de haber sido golpeada. La vida nocturna y el sida son algunos de los temas que trata sin ambages, tal y como son, sin aditivos, con todo su dramatismo, sobre todo en lo que afecta a la enfermedad. La obra de Ryan Macginley se desarrolla en medio de estas poéticas absolutamente definidas. Transita por espacios emocionales avivados por el uso del color. Trata aspectos de la vida nocturna, retratos en los que acorta la distancia y se implica con el mundo personal de los personajes. Su mayor aportación es acentuar la intimidad en temas que habitualmente invitan a un tratamiento distanciado. Acerca a lo cotidiano temas que en otros autores aparecen o bien con tratamientos muy apasionados o muy asépticos. Así, el cuerpo aparece en su propia normalidad, no erotizado, sin cargar las tintas en el deseo. Se invita al espectador a convivir con él con tranquilidad incluso en escenas fuertemente sexualizadas donde varios jóvenes aparecen retratados a modo de orgía. No apuesta por un rígido objetivismo ni por lo subjetivo sino por convivir con la vida nocturna, el exceso, el cuerpo y las circunstancias de sus personajes.

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