La camisa de fuerza

«La muerte es sólo el principio» anuncia el cartel de The Jacket y, en efecto, la película comienza con Adrien Brody siendo disparado en la cabeza en la llamada Primera Guerra del Golfo. A partir de ahí, nace toda una pesadilla para el personaje principal, quien termina en una clínica psiquiátrica donde los pacientes son tratados por medio de sesiones con la camisa de fuerza del título original (¿sería políticamente incorrecto traducirlo?), encerrados en cámaras del depósito de cadáveres (¡!). A todo esto hay que sumar alucinados viajes temporales de Brody, el siniestro responsable de la clínica o el peculiar y desaprovechado compañero demente. Con una estética de videoclip siniestro (bombardeo de imágenes distorsionadas y a gran velocidad, escasa iluminación...), la película es de esas que plantea preguntas que no responde: ¿Cuándo muere realmente Brody?, ¿muere realmente?, ¿por qué el niño iraquí es el mismo que aparece como paralítico?... y eso sin entrar en la decena de paradojas temporales que siempre plantea toda película con viajes en el tiempo. En realidad, tan rebuscado argumento y tanta vuelta al guión sólo termina por perjudicar a la historia que, si se hubiera planteado con menos pretensiones, probablemente hubiera dado un mejor resultado (como en Doce monos , por ejemplo, una clara fuente de inspiración). A destacar, eso sí, las interpretaciones del citado Brody, del veterano Kris Kristofferson o de la bellísima Keira Knightley, alejada momentáneamente de los piratas del Caribe. Y, para quien todavía no le conozca, señalar que el desequilibrado y simbólico (ojo a su rosario) compañero de Brody es Daniel Craig, el nuevo James Bond. «THE JACKET»: Estados Unidos-Alemania. Dirección: John Maybury. Intérpretes: Adrien Brody, Keira Knightley, Kris Kristofferson, Jennifer Jason Leigh. 103 minutos.