Epifanía erótica

MÚSICA Auditorio ?oncierto de la Sinfónica de León Odón Alonso, bajo la dirección de Dorel Murgu. A las 20.30 horas. Entradas: 9 euros (platea) y 6 euros (anfiteatro). Pub Molly Malone's Concierto del batería leonés Luis Lugobama. A partir de las 20.30. Entrada libre y gratuita. Calle La Paloma. Vegacervera Concierto de rabel a cargo de José Francisco Fernández Juárez. En la residencia de ancianos. A las 18.00 horas. TEATRO El Albéitar El Teatro Nacional de Marionetas de Praga representará La flauta mágica, de Mozart. A las 19.00 horas. EXPOSICIONES Casa de las Carnicerías Obra pictórica de Jaime Rollán. De 19.00 a 21.00. Festivos, de 12.00 a 14.00. Plaza de San Martín, 1. Musac Exposiciones de Pipilotti Rist, Enrique Marty, Wilfredo Prieto, Fusión y Vasava. De martes a viernes de 11.00 a 20.00; fines de semana, de 10.00 a 21.00 horas. Lunes cerrado. Entrada gratuita. Reyes Leoneses, 24. Sala Bernesga Obra pictórica de José Olivé. De lunes a viernes de 12.00 a 13.30 y de 18.00 a 21.00, sábados de 12.00 a 14.00 y de 19.00 a 21.00. Roa de la Vega, 8. Sharon Art Obra pictórica de Muñoz Renedo, Miguel García Linares y Eustaquio Segrelles. De martes a domingo de 18.30 a 21.30. Calle Cervantes, 10. Galería Ármaga Obras de M. Escanciano: Caballo Griego . De lunes a viernes de 12.00 a 14.00 y de 18,00 a 21.00; sábados de 12.00 a 14.00 horas. Alfonso V, 6. Casa Botines La escultura en la Ruta Jacobea. Arnao de Bruselas. Hasta el 12 de febrero. De 12.00 a 1400 y de 18.00 a 21.00; festivos, de 12.00 a 14.00. Arte Absenta Obras de Emilio Arce, M. Álaez, T. Behrens y Nitodavila. De martes a viernes de 18.00 a 21.00, sábados de 11.00 a 14.00. Gran Vía San Marcos, 19. Casa de Cultura de Pinilla Exposición de escultura del Grupo 99, formado. Del 19 al 31 de enero, en horario de 17.00 a 20.00. Colegio de Arquitectos Obras de Óskar Ranz, Fernando Linares y Santos Javier Álvarez, y obras seleccionadas. De 12.00 a 14.00 y de 19.00 a 21.00. Fines de semana, de 11.30 a 14.30. Conde Luna, 6. Arte Lancia Obras de Felipe del Campo. De 12.00 a 14.00 y de 18.00 a 21.00, de lunes a viernes. Calle Gil y Carrasco, 1, 1º. Sala Provincia Obras de Amador Rodríguez. De lunes a sábado de 11.00 a 14.00 y de 18.00 a 21.00 horas. Hasta el día 31 de este mes. Calle Puerta de la Reina, 1. Padre Isla 24 Obras de Carmen García Suárez e Isidro Hernández Valcuende. De 11.00 a 14.00 y de 18.00 a 21.00, de lunes a viernes. Avenida Padre Isla, 24. Tráfico de Arte Instalaciones de Juan Udaondo. De 18.00 a 21.00, de lunes a viernes. Serranos, 2. Cubo Azul Fotografías de Manuel Vázquez: Urbanation . De 17.30 a 21.00; sábados de 12.00 a 14.00. Calle San Lorenzo, 2. El Albéitar Marlene Dietrich, una leyenda en imágenes. Hasta el 17 de febrero. De 12.00 a 14.00 y de 18.00 a 21.00. ¿Cuánto ha amado la crítica francesa la última película de Bertrand Blier? Ni mucho ni poco sino todo lo contrario. La división de opiniones prevalece en los juicios emitidos sobre ¿Cuánto me amas?. Lo mismo ocurre entre el público, a la vista de los foros de discusión electrónicos. Con un apreciable resultado en taquilla, el director de Los rompepelotas (1974) ha logrado, al menos, romper la espiral del fracaso comercial experimentado por sus tres anteriores títulos: Mon homme (1996), Los actores (1999) y Les côtelettes (2003). El crítico Patrick Fabre fue el más entusiasta en el elogio. «Como si Blier se hubiera, no desnudado, sino simplemente declarado, nos toca decirle cuánto lo amamos», escribe en Studio Magazine. «Una comedia atractiva que consigue hacernos olvidar los últimos traspiés del cineasta», coincide Frédéric Mignard en un rincón cinéfilo de Internet, donde destaca «la mirada madura y compleja» de Blier quien, «tras el tono de la comedia, desvela su tristeza y su miedo a la soledad y el envejecimiento». En lo que todo el mundo está de acuerdo es en el protagonismo absoluto de Monica Bellucci. Su belleza exuberante eclipsa el buen trabajo de Bernard Campan, como oficinista afortunado, y la colaboración de Gérard Depardieu, que tenía que interpretar a un macarra pero que, como de costumbre, hace de Depardieu. «Monica Bellucci nunca ha estado tan fastuosa e inspira visiblemente al cineasta, que ha recuperado su extravagancia poética», constata Figaroscope. Desde luego Monica Bellucci, cada día más guapa, es una verdadera epifanía erótica por si sola. Pero eso no basta para hacer un buen filme, objeta Aurélien Allin. En Score Alex Masson encuentra que la única novedad de la película reside en «una manera de filmar a Bellucci que asume lo que todos los directores querrían hacer de ella: una madona y una puta». Con mayor crueldad se expresa Clément Graminiès al constatar que la bella italiana confirma ser la «única actriz capaz de trabajar con grandes realizadores en sus peores películas (Spike Lee, Terry Gilliam)». «El interés del cineasta se ha limitado claramente a un culo y un par de tetas, hasta tal punto que uno se pregunta en serio si el proyecto no fue pensado con la esperanza insensata de...», añade.