La alacena más sabrosa
Con la vista puesta en la etiqueta que blindará el sabor leonés, la industria agroalimentaria da un paso más y afianza su posición estratégica en la economía provincial. Amparadas por la Diputación Provincial, 79 empresas participan desde hoy
Cecina, queso, manzanas, pimientos, mantecadas, peras, castañas o botillo son sólo algunos de los productos exquisitos con los que nos deleita León que ya se han hecho un hueco en el panorama gastronómico nacional y también internacional.
La cita más importante para la promoción de lo más artesano de la provincia comienza hoy, con la apertura de la Feria de los Productos de León, el máximo escaparate de la gastronomía leonesa que forma parte de una industria pujante y estratégica en el desarrollo económico de León.
Prueba de ellos son sus cifras. El sector agroalimentario está formado por unas 1.200 empresas que generan más de 6.000 empleos directos y tienen una facturación anual de 260 millones de euros. Además, durante el año pasado un total de 30 nuevas sociedades se incorporaron al sector tras una inversión privada de 20 millones de euros, lo que hizo posible la creación de 81 puestos de trabajo. El crecimiento del tejido agroindustrial se ha notado especialmente en la elaboración de vinos y en la transformación de productos cárnicos de vacuno, cerdo y pollo.
Pero la industria agroalimentaria de León se agrupa bajo una treintena de asociaciones, indicaciones geográficas protegidas, denominaciones de origen y marcas de garantía que son el aval perfecto de la calidad y el buen hacer. Su desarrollo sería mucho más costoso sino fuera por el apoyo de las administraciones. Así, la Diputación Provincial se vuelca con los empresarios para facilitar el recorrido de las viandas leonesas dentro y fuera de nuestras fronteras.
Al menos así lo reconoce el presidente de la Asociación de Productores Agroalimentarios de León, Jacinto Peñín del Río, que destaca la implicación de la institución provincial en el desarrollo de la industria agroalimentaria.
Papel importante, según Peñín, es el que desempeña también la Junta de Castilla y León, sobretodo a través de Excal, para facilitar las exportaciones. Reconoce que, a veces, el empresariado leonés «es poco ambicioso» a la hora de proyectar su salida al exterior, aunque también se encuentra con el hándicap de la «carencia de infraestructuras o del alto coste del transporte» para las pequeñas empresas que son la mayoría de las que conforman el sector.
El apoyo de la Junta se traduce en ayudas a las empresas por importe de casi 100 millones de euros anuales, tanto para nuevas inversiones como para modernizar las instalaciones ya existentes.
Confía en que el cambio de fecha en la celebración de la feria mejore su repercusión. «Esta es una época difícil, pero acudimos con las mismas expectativas y confiamos en que, la cercanía a la Navidad, incremente el consumo», recalca Peñín. Esta asociación se creó en 1996 y agrupa a un buen número de empresas cárnicas, de dulces, legumbres o quesos. Peñín reconoce que la época actual es complicada para emprender grandes proyectos pero sí destaca el espíritu emprendedor de muchos empresarios, lo que repercute en la pujanza del sector.
Una industria vinculada directamente al mundo rural y que marca el paso de la reconversión de la economía leonesa del sector primario al transformador o al industrial. «Sin duda alguna que el sector se asienta en el mundo rural y es clave para fijar población», augura Peñín.
La Feria de los Productos de León arrancará este año con dos importantes novedades. Una de ellas es la etiqueta diseñada por la Diputación para blindar el sabor leonés, que estará disponible a principios de año, y a la que ya han confirmado su adhesión unas 300 empresas. Un paso fundamental para distinguir lo mejor de la despensa leonesa de imitaciones e intrusismos y cuyo objetivo es el de salvaguardar la identidad y la singularidad de los productos.
Para los productores leoneses es una «buena idea» porque «defiende lo nuestro» frente a la competencia desleal y supondrá «un valor añadido al producto», dice Peñín.
Uno de los productos más antiguos y típicos de León es el chorizo, que estrenará en la feria su marca de garantía concedida por la Junta de Castilla y León, lo que supone el espaldarazo para un embutido señero de los sabores de la provincia. Un sector con casi un centenar de productores que, gracias a la marca de garantía, conseguirá garantizar ante el mercado el origen de sus diez millones de kilos de producción anual. Así ha culminado el trabajo inicial de la Asociación para la Promoción del Chorizo de León, que tendrá su meta en la obtención de la Indicación Geográfica Protegida.
Su presidente, Jorge Rojo, destaca que este sello implica la «unión» de los productores en un sector formado por un centenar de empresarios, aunque sólo treinta se han adherido, de momento, a la marca de garantía. Pero, quizá, lo más destacable es la mejora en la calidad en la producción de un sector que suma 100.000 kilos de producción media anual por empresario.
También por primera vez en la Feria de los Productos de León habrá representación de la carne de caballo hispano-bretón de San Emiliano y de la carne de altura de la Braña leonesa que forman parte de los 81 puestos que harán de la plaza de Toros de León la mejor prueba del apoyo a la industria agroalimentaria leonesa. Al menos esto es lo que pretende la Diputación Provincial, según las palabras de su vicepresidente primero, Juan Martínez Majo: «A pesar de la situación actual estamos haciendo un esfuerzo para que la feria sea un éxito; el potencial de las empresas es muy grande y los productos de León ya tienen su calidad más que demostrada».
Majo también reconoce el trabajo de la institución provincial en la difusión de la huerta leonesa, que se traduce en más de una decena de promociones realizadas en distintas provincias españolas y también en el extranjero. A este respecto, el vicepresidente primero tiene claro que aún queda trabajo por hacer para lograr que los productos de León lleguen a los mercados europeos.
A la hora de elegir qué producto echar en la cesta de la compra, el presidente de la Asociación de Productores Agroalimentarios lo tiene claro: «Los productos de León siempre han estado a la cabeza en calidad y presentación, se están haciendo las cosas bien y podemos competir con cualquiera». Ante la duda, la feria es la mejor ocasión para deleitar al paladar.