La sopa de trucha, el sabor estrella para entrar en calor

La sopa de trucha es uno de los platos estrella de la gastronomía leonesa. Variante de la sopa de ajo, goza de una particular aceptación en el Órbigo y en zonas dónde están otros ríos propicios para la pesca. Además de truchas, sus ingredientes son pimentón, pan de tres días, cebollas, ajo, pimientos, perejil y sal. Cuando esté cocido, se vuelca en una cazuela preparada con pan migado y se rocía con un poco de machacado y aceite. Hay que procurar que las sopas queden secas para que se puedan comer con tenedor. Algunos de los establecimientos en los que se puede degustar la mejor sopa de trucha son la Cafetería Polígono X o el restaurante Llar (León); la piscifactoría Villanueva, en la calle del Río 43, en Carrizo de la Ribera, y en prácticamente todos los establecimientos hosteleros que nacieron a expensas del Órbigo y de su tesoro más preciado. De hecho, en esta comarca la sopa de trucha es un plato que se conoce desde hace más de sesenta años. Un plato que cada año se ensalza en unas jornadas que se celebran en Hospital de Órbigo. Otro lugar en el que degustar este plato tradicional es el restaurante Natal (Castrillo de San Pelayo). Este fin de semana habrá degustación en la Muestra del Gallo de La Vecilla.