LEÓN, EL LUGAR PARA LOS GOLOSOS
Monas de pascua: costumbre tardía pero ya afianzada
La Pascua cristiana tradicional dura 50 días desde el domingo de Pascua de Resurrección, el cual tiene fecha variable. Este domingo es siempre el siguiente a la primera luna llena del equinoccio (y cae siempre entre el 22 de marzo y el 25 de abril). Este año se celebrará el día 24 de abril con la última procesión del 2011. Existe una fórmula que permite el cálculo de la fecha de Pascua, un cómputo realizado originalmente por la Iglesia alejandrina y que posteriormente fue adoptado por toda Europa. Sin embargo, debido a que siglos después surgió la diferencia de calendarios usados por la iglesia católica (calendario gregoriano) y las iglesias orientales (calendario juliano), la fecha de Pascua varía para cada iglesia, y solo en algunas ocasiones logran coincidir. Un día que también tiene su significado fuera de lo religioso. Así, la vianda típica de este día es la mona de pascua. Muy arraigada en comunidades autónomas como Aragón, Valencia, Murcia o Cataluña simboliza que la Cuaresma y sus abstinencias se han acabado. El nombre proviene de la munna término árabe que significa «provisión de la boca», regalo que los moriscos hacían a sus señores. El pueblo que más fama tiene en la fabricación de este producto es el de Alberic, en la provincia de Valencia. Sin embargo en la mayor parte de la Comunidad Valenciana su consumo está más restringido a la Pascua, al igual que en Baleares o Cataluña. Algo parecido sucede en León, dónde la tradición de comprar la mona de pascua es mucho más reciente. Además, con el paso del tiempo ha ido adquiriendo numerosas formas y también se elabora con ingredientes diferentes y aptos para los más golosos. En su origen, la mona de pascua era una masa de pan dulce que se decoraba con un huevo duro. Pero empezó a modificarse, primero cambiando el huevo de gallina por uno de chocolate. Hoy en día son figuras, tartas o pasteles muy elaborados y decorados, dándole colores y adornándolos con los elementos que más gustan a los niños. Tradicionalmente, el padrino regala la mona a su ahijado el domingo de Pascua después de misa. El lunes de Pascua es tradición que se reúnan dos o tres familias o un grupo de amigos y que vayan a comer la mona juntos a algún lugar, con otras viandas.