ASCENSO DEL espigüete
Rendirse a un gigante
Valverde de la Sierra.En Picos de Europa y al lado del parque natural de Fuentes Carrionas, Valverde de la Sierra es el lugar ideal para los amantes de la escalada. Dos recorridos permiten ascender a la cima del pico Espigüete, de 2.450 metros de altura. ?? por nuria gonzález
Vista del Espigüete, una de las cumbres más altas de los Picos de Europa.
Desde abajo, impresiona aunque desde su cima deja ver un paisaje fantástico. El pico Espigüete tiene dos cimas: la oeste, de 2.450 metros y la este, de 2.428 metros. Una mole de aspecto macizo que sin embargo está hueca en su interior. Y allí están también algunos de sus mejores tesoros: enormes cañones, ríos y lagos subterráneos y grandes simas y cuevas. Algunas tienen nombre propio, como la del Anillo o la de Agudín. Casi todas las conocen los aficionados a las maravillas de la naturaleza.
El Espigüete parece inalcanzable pero no lo es. Hay, desde todas sus vertientes, rutas trazadas y señalizadas. Desde la localidad leonesa de Valverde de la Sierra existen dos posibilidades. Una de ellas, que parte de la pista que sale a la derecha de la iglesia del pueblo, es quizá una de las más conocidas. Una senda que surcan, verano e invierno, senderistas o los mantañeros más aguerridos. Porque el Espigüete, que se divisa a este lados de los Picos de Europa, en León y al otro, en Palencia, está nevado salvo en los meses de verano si es muy cálido. A veces, antes de que se instale el otoño, un suave manto de nieve cubre una cumbre mítica en la provincia.
Dicen quienes han tocado su cumbre que la belleza deslumbra la vista. Y que la línea del horizonte se desdibuja allá donde empiezan los confines.
Sendero de verano, ruta de invierno, a los pies del Espigüete, enclavada en un valle glacial, en mitad del Parque de los Picos de Europa, se alza una pequeña y hermosa localidad: Valverde de la Sierra.
Para quienes prefieren observar la imponente cumbre desde abajo, el pueblo ofrece una vista única y paisajes tintados en verde. Territorio regado por el río Grande y el Mercero, antaño propiedad de los señores de Tierra de la Reina. Uno de ellos, Fernando de Tobar, obtuvo de Carlos II el título de marqués de Valverde, heredado de generación en generación hasta llegar hasta manos ahora de Irene Vázquez de Parga y Andrade.
Merece la pena detenerse en Valverde de la Sierra y tomar agua de sus pilones, situados en mitad de cada barrio: la Vega, Abajo y Mental. Y disfrutar de la mole caliza.
Si hay quien se atreva, que lo hay, subir el Espigüete tiene incluso una web, con planos, mapas y rutas de acceso: www.espiguete.es.
