En honor a los viajeros

Cada rincón es un recuerdo del pasado y tan acogedor que los que se van ya piensan en regresar. La casa rural El Holandés Errante está situada en una casona de piedra del siglo XVIII aunque, quizá, lo más sorprendente sea el entorno en el que está ubicada. Murias de Paredes, un pequeño pueblo de la comarca leonesa de Omaña, brinda a los huéspedes horas de tradición, tranquilidad y naturaleza.

Este alojamiento, que abrió sus puertas en el año 2006, dispone de cinco habitaciones, de las que dos son dobles, otras tantas triples y cuenta también con una suite dúplex para cuatro personas con bañera y duchas de hidromasaje. Todas ellas están decoradas con estilo y con muchas antigüedades, lo que confiere un carácter especial a cada rincón.

En cuanto a las zonas comunes, destacan un espacio para la lectura y dos salones con chimenea de leña para disfrutar en compañía o de algunos de los libros de su extensa biblioteca. Eso sí, es un lugar no demasiado alejado del ruido de la ciudad pero sí lo suficiente para que apenas haya cobertura de telefonía móvil o ADSL. Precisamente por eso se convierte en un lugar adecuado para el descanso.

El Holandés Errante cuenta también con servicio de restaurante, en el que se podrán degustar platos típicos de la zona acompañados de los mejores caldos procedentes de su amplia bodega.

El viajero también tiene a su disposición literatura local con planificación de rutas y actividades para aprovechar al máximo su tiempo libre. Así, no son pocas las que ofrece El Holandés Errante. De hecho, ofrece también la posibilidad de utilizar bicicletas para descubrir el entorno más próximo y facilita información sobre rutas de montaña señalizadas como las fuentes del Omaña y el ascenso al monte También, siempre que la climatología lo permita, es posible acercarse a Las Médulas, Los Lagos de Covadonga, las Cuevas de Valporquero, a la comarca del Bierzo o Babia, que requieren de excursiones de día completo.