Paraíso en Tierra de Campos

El centro de turismo rural El Jardín de la Huerta es una antigua hacienda de labranza, restaurada recientemente respetando al máximo la estructura original, cuidando todos los detalles, lo que ha dado lugar a un moderno hotel rural para huéspedes y sus mascotas. Además, sus dueños han aprovechado en la decoración todos aquellos elementos que recuerdan lo que fue este edificio, convirtiéndolo así en un pequeño museo etnográfico.

Este alojamiento rural está situado en la localidad de Galleguillos de Campos (Sahagún), en un paraje incomparable en la ribera del río Cea, lo que hace de este lugar el más apropiado para la observación de aves acuáticas, migratorias y rapaces (garzas reales, ánades, avutardas o cernícalos, entre otras especies.

El Jardín de la Huerta hace honor a su nombre y por eso dispone de más de cinco mil metros cuadrados de zonas verdes, con numerosas especies arbóreas, y acondicionado para practicar golpes cortos de golf, minigolf o labores hortícolas en temporada de la huerta. Es perfecto el mantenimiento del césped. Además, la casa facilita todo el material necesario para practicar estas actividades.

Siguiendo la normativa vigente, se ha dotado a este centro de las más modernas medidas de adaptabilidad para personas en sillas de ruedas y otras necesidades motrices especiales. Dispone de una habitación rústica especial, en la planta baja, con un excelente acabado y preparada para personas de movilidad reducida. Igualmente los accesos generales de todo en centro están preparados para el disfrute total de todo tipo de personas de cualquier edad y de situación física. La sala Solarium recibe luz solar durante casi todo el día, por lo que es una zona especialmente pensada para personas con problemas reumáticos o que necesitan tomar baños de sol.

Este centro de turismo rural cuenta también con un completo gimnasio y con vistas al jardín para ejercitar el cuerpo y la mente y también con piscina cubierta, no climatizada, de uso privado y exclusivo para los clientes alojados. Esta piscina está situada en uno de los laterales de la huerta y dispone de unas extraordinarias vistas. Tiene accesos directos al jardín y al gimnasio.

Sus completas instalaciones hacen posible la práctica de numerosas actividades sin salir de la casa: gimnasia de mantenimiento natación, talleres de manualidades y bricolaje, horticultura, ejercicio en la hierba y observación cinegética. Ya en el exterior se pueden visitar monumentos de esta zona, de gran importancia histórica, o acercarse al románico palentino.

Este hotel rural no sólo ha pensado en el bienestar y la comodidad de los clientes sino también de sus mascotas. Por eso, El Jardín de la Huerta dispone de un servicio de alojamiento de mascotas que será gratuito para estancias de dos noches.

Su restaurante tiene un comedor con capacidad para medio centenar de comensales, a los que deleitarán con su cocina más típica, que recrea los sabores tradicionales de la comarca aportando las excelencias de productos naturales minuciosamente seleccionados. El bar es otro de los rincones más cálidos de este alojamiento. Construido en madera y piedra tallada, se pueden degustar vinos de calidad, tanto autóctonos como nacionales y tapas caseras, además de jugar al billar.