el ‘efecto’ MasterChef junior
El ‘boom’ de los talleres de cocina
De la tele a León. Como un cocinero profesional pero sin manchar nada en casa. El sueño de cualquier amante de la cocina. Es lo último en León. Clases para aprender a crear platos. Lo ha puesto de moda la televisión. Lo mejor para poner un chef en casa.
Sin secretos en la cocina. Restauración a mediad de todos. Talleres para niños, cursos para adultos. Temáticos, de productos, de cocinas del mundo. Todo lo que permite la imaginación.
Nunca cuatro niñas y un programa de televisión habían hecho tanto por la cocina en León. Las leonesas Esther, Cristina, María, Alba y MasterChef Junior han convertido los talleres de cocina en un auténtico ‘boom’.
Es la actividad más demandada. Clases particulares para lo que antes se aprendía cacharreando en casa, si las madres dejaban entrar en la cocina, claro. Instalaciones profesionales, talleres a medida, asesoramiento de chef, cursos monográficos... Es lo último.
La primera experiencia la puso en marcha en León el Parador de San Marcos. Mucho antes de que la televisión hiciera famosos a cocineros aficionados. Cursos de cocina para familias donde se enseñaba a los niños el arte de la restauración. Y antes también de que la televisión encontrara en los reality show entre fogones un gran filón de audiencia, una emprendedora leonesa puso de moda en la ciudad el ‘love cooking’. Escuela de cocina, talleres mini chefs, clases de catas, eventos privados, gastroboutique, coffe & cakes... todo en un mismo espacio. Es Dolcetriz, escuela de cocina divulgativa. Han aprendido allí los secretos de cocina dos mil adultos y más de mil niños, entre ellos María, una de las cuatro concursantes leonesas de la primera edición de MasterChef Junior, y su madre. En la cocina de Dolcetriz, en la calle Comandante Zorita, en pleno Barrio Italiano de León, María aprendió la técnica para hacer helados y sorbetes. Se la enseñó personalmente Eva Dolcetriz. Una ‘asignatura’ culinaria que la pequeña chef no dominaba —su especialidad es la cocina japonesa y la fusión oriental-española— pero sin la que no podía entrar en el programa. Era uno de los ‘exámenes’ de acceso.
Una experiencia que podría repetirse porque MasterChef busca nuevos concursantes para próximas ediciones. Y, tal vez también familias cocineras para concursar.
El éxito televisivo de María, Esther, Cristina y Alba se ha trasladado a los talleres de cocina. Lleno total. Aprender de todo. Trabajar un producto, un origen de cocina, una técnica, un minicurso temático, un curso completo de restauración, los Kitchen Camps para los periodos de vacaciones de los niños, mini concursos, clases a medida para grupos de amigos y los WeTaste Wine o Gin&Tonic, para aprender a catar las bebidas y disfrutarlas con los cinco sentidos.
No hay que llevar ni delantal. Una experiencia única, que no es posible en casa: trabajar en una cocina profesional. También los niños. Con los ingredientes, materiales y utensilios de los grandes chef. Y clases a medida impartidas por los mejores cocineros del momento, los leoneses también. Una especie de ‘show cooking’ y la delicia de ver trabajar en directo a los mejores creadores. Son las masterclass con Cocinandos, Daniel Mirai, Pablo...
Dominar la cocina española y su multitud de arroces, por ejemplo, o iniciarse en la china, italiana, mexicana, hindú, marroquí o argentina. O experimentar la cocina de colores. Amarillo para el pollo al curry, la pizza con queso cheddar y las natillas con mango. Verde en los tallarines con espinacas, merluza en salsa verde y manzanas dientunas. Marrón para la ensalada de lentejas, palitos de pescado con kikos y brownie. Rojo en un menú de tomates rellenos, coca de jamón y pimiento rojo y crema de fresas. El límite está en la imaginación.
La técnica la ponen Eva Dolcetriz y sus especialistas. En comida oriental, arroces, pastas, vinos, ginebras, cervezas o repostería. Y lo más demandado: el sushi y el diseño de alta costura en tartas y cakes.
Cocina de autor no sólo en los restaurantes. Arte y ciencia en la mesa convertidos en placer. No el de degustar sino el de crear. Como los grandes maestros. El sueño de ser chef.
