Cerrar

vega de espinareda

esencia natural

Puerta de entrada a Los Ancares, su entorno natural es su principal potencial, aderezado con el monasterio neoclásico más destacado del Bierzo y un yacimiento de pinturas rupestres esquemáticas único..

El Monasterio de San Andrés de Vega es, dentro del estilo neoclásico, el más destacado del Bierzo.

Publicado por
maría j. alonso
León

Creado:

Actualizado:

E s la puerta de entrada a la Reserva de la Biosfera de Los Ancares Leoneses, garante de belleza paisajística, hábitat de imponente fauna. Vega de Espinareda es una apuesta segura para el turista que disfruta del aire libre y de la libertad que ofrece la naturaleza, pero también es reseña en el ámbito patrimonial en la figura del imponente Monasterio de San Andrés, declarado Monumento Histórico en 1982 y considerado como el más importante del Bierzo dentro del estilo neoclásico. Tanto su exterior, en el que sobresalen dos esbeltas torres, como su interior, dominado por un retablo de grandes proporciones, son de visita obligada. Como obligada debería ser también la aproximación a las pinturas rupestres de Sésamo.

Conocidas desde siempre por los lugareños, estas pinturas postneolíticas esquemáticas no fueron objeto de atención hasta la primavera de 1982. El yacimiento arqueológico de Peña Piñera incluye figuras antropomorfas y zoomorfas, aunque lo que predominan son los trazos lineales rápidos y básicos.

El puente romano que permite atravesar a pie el río Cúa en pleno casco urbano es otro de los grandes atractivos de Vega de Espinareda. Su construcción se sitúa entre los siglos I y II, coincidiendo con la conquista romana del Bierzo y la explotación de sus yacimientos auríferos, y en él nace la calle más antigua de la localidad. El puente es en la actualidad lugar de referencia también en el marco de la playa fluvial de Vega, una de las mejores y más grandes de la comarca berciana, reclamo turístico de primer orden durante los meses de calor.

Sobre el agua cruza el río Cúa, en el agua puede refrescarse el turista y el líquido elemento da forma también en Vega de Espinareda a la Fuente de la Vida. Situada en la cara sur del Monasterio de San Andrés, fue construida en 1742 por un monje benedictino y a sus aguas, que salen a través de dos caños de bronce, se les atribuyen propiedades curativas.

Cargando contenidos...