De viaje a
La robla
Muy cerca de León capital, este municipio minero ofrece todos los servicios necesarios para garantizar la calidad de vida de sus vecinos a un precio muy asequible. No falta de nada y sobra qué ver y hacer. Las Barreras, la Ermita de Celada o los murales del pintor José Vela Zanetti del centro de FP integran parte de su oferta más turística y cultural
M unicipio minero ubicado a tan sólo 26 kilómetros de León capital, cuenta con más de 4.360 vecinos y todos los servicios necesarios. La Robla es una opción ideal para desarrollar un proyecto de vida asequible, pues ofrece todas las garantías a nivel servicios y lo hace a un coste muy bajo, localizándose además en un lugar estratégico. Colegio, instituto, centro de Formación Profesional (FP), centro de salud con urgencias nocturnas, guardería municipal, escuela de música con nueve instrumentos, casa de la cultura, pabellón deportivo que es la sede de las diferentes escuelas deportivas locales, biblioteca y diversas zonas de ocio, como el área recreativa del pinar del Rabizo, y parques infantiles hacen cómoda la vida de sus vecinos y más que buena su calidad de vida.
La Robla ofrece también una amplia oferta cultural aderezada con importantes recursos turísticos, pues no hay que olvidar que este municipio de la Montaña Central Leonesa, a orillas del río Bernesga, cuenta en su haber patrimonial con el conjunto de Las Barreras (Solana de Ferrar), una formación geodésica similar a Las Médulas bercianas de la que se dice que sus arenas y barros tienen propiedades curativas. En su territorio se encuentran también la Ermita de Celada, un santuario románico que cobija en su interior un hermoso retablo herreriano; el acueducto El Encañao, del siglo XVII; o el Puente Romano ubicado en sus inmediaciones. Destacable es igualmente su oferta de deporte de naturaleza, pues ofrece diversas rutas de senderismo (A Fontañán, a las ruinas del Castillo de Alba, la Ruta del Minero, la subida a Fonfría, la Ruta de la Lomba o la Ruta San Salvador— ideales para conocer el entorno que rodea a La Robla de una manera más desenfadada.
Todo ello, como el buen comer —el cocido y los embutidos tan propios de los pueblos de montaña no faltan en La Robla ni en ninguna de sus pedanías— es un aderezo perfecto para lo que mejor sabe hacer el Ayuntamiento: atender las necesidades de sus vecinos y cubrir sus expectativas. «Se dan muchos servicios y a coste muy bajo», recalcó el alcalde, Santiago Dorado, haciendo hincapié en que la cercanía de su municipio con León lo convierte en un lugar ideal para vivir. Un núcleo residencial que el próximo año incrementará su oferta de servicios con la apertura de una guardería municipal con precios más que competitivos, a partir de 75 euros. Ahora mismo, el servicio de guardería existe pero es concertado. Un plus para las familias con niños, como también lo son las escuelas deportivas.
Doce monitores se encargan del buen funcionamiento de las mismas, que cuentan con más de 400 usuarios con edades comprendidas entre los 3 y más de 80 años. Hay escuelas de atletismo, fútbol o baloncesto, gimnasia de mantenimiento y para la Tercera Edad, iniciación al deporte para los niños de 3 a 6 años y formación polideportiva para los que tienen entre 6 y 8 años. Actividades que tienen lugar en el polideportivo —dotado de pistas de fútbol sala, baloncesto y balonmano— y también en otros centros públicos, como el Hogar del Pensionista.
En definitiva, en La Robla se vive bien y hay mucho que hacer y mucho que ver.