Principio y final del viaje
Los lugares emblemáticos de la expedición
Las efemérides del V Centenario de la primera circunnavegación a la Tierra, con Magallanes y Elcano, trae consigo una programación extensa y variada. Ciudades como Sevilla y Sanlúcar de Barrameda proponen un viaje al pasado para poder revivir este hito histórico
Andalucía tuvo un papel primordial en la primera circunnavegación de la historia. Sevilla y Sanlúcar de Barrameda se encuentran desde entonces estrechamente ligadas a dicho acontecimiento histórico. Este 2019, cuando se cumplen 500 años desde que Fernando de Magallanes y Juan Sebastián Elcano abandonaran tierras andaluzas, ambos destinos han querido conmemorar el V Centenario. ¿Cómo? A través de una serie de rutas, actividades y exposiciones, donde se podrá revivir todos los detalles del viaje más largo del mundo.
Sevilla fue el inicio, donde comenzó a fraguarse todo. En aquella época, era el epicentro del comercio con las Indias. Por ello, el marinero portugués Fernando de Magallanes se trasladó a la capital andaluza con la intención de obtener permisos y financiación para su proyecto: llegar a las islas de las Especias inaugurando una nueva ruta marítima por Occidente. Magallanes pretendía bordear el continente americano, recién descubierto por Cristóbal Colón 25 años antes. La idea pareció convencer al rey Carlos I quien puso a disposición de la expedición los puertos de Sevilla y Sanlúcar de Barrameda.
'MAGALLANES EN RUTA'
Se trata de un itinerario que recorre los principales lugares relacionados con el portugués.
Durante los años que permaneció en Sevilla preparando el viaje, escenarios como el Puente de Triana (antiguo Puente de Barcas), la avenida de la Constitución, donde se encuentra la Catedral, o la Plaza de la Contratación (Casa de la Contratación) desempeñaron un papel importante en la gestación de la expedición y la vida del marinero durante su estancia en la ‘otra perla del Guadalquivir’. Un total de 15 enclaves forman la ruta hispalense:
1. CAPILLA SANTA MARÍA DE JESÚS. PUERTA DE JEREZ. Fundada en 1506 por Maese Rodrigo, es el único vestigio que queda en pie de lo que fue la primitiva Universidad de Sevilla.
2. CASA DE LA CONTRATACIÓN. Fue la institución fundamental para organizar la expedición .
3. REAL ALCÁZAR. PATIO DE BANDERAS. Su jurisdicción se extendía hasta las Atarazanas. Cuando Magallanes preparaba en Sevilla su viaje era Alcaide del Alcázar y las Atarazanas el portugués Jorge de Portugal, que haría valer su influencia para facilitar el proyecto del compatriota.
4. LA BORCEGUINERÍA (ACTUAL CALLE MATEOS GAGO). En esta parte de la ciudad fijó su residencia Magallanes durante el tiempo que vivió en la capital hispalense.
5. GRADAS DE LA CALLE ALEMANES. Por aquella época era una lonja abierta en pleno corazón de la ciudad donde cerraban negocios comerciantes y banqueros. Aquí se remató la suerte de la Nao Victoria al volver de su gloriosa travesía.
6. SANTA MARÍA DE LA SEDE. CATEDRAL DE SEVILLA. Allí rezaron los expedicionarios antes de salir y allí agradecieron la gesta los supervivientes de la Nao Victoria, como recuerda una inscripción.
7. ARCHIVO DE INDIAS. Originariamente, en la Sevilla de Magallanes, fue la lonja de Mercaderes. Reformada en el siglo XVIII para albergar la documentación de las posesiones españolas en Ultramar, los testimonios originales sobre la primera vuelta al mundo allí reunidos son muchos: cédulas, cartas, libros de cuentas, etc…
8. REALES ATARAZANAS EN LA CALLE TEMPRADO. La mayor edificación asociada al puerto de Sevilla son las Reales Atarazanas, el arsenal naval construido en 1252 por Alfonso X El Sabio donde invernaban las galeras reales. Las naves de Magallanes salieron de estos astilleros.
9. TORRE DE LA PLATA EN LA CALLE SANTANDER. El camino hacia el puerto desde el Archivo de Indias prosigue en línea recta junto al recinto donde después se emplazó la Casa de la Moneda, hasta la Torre de la Plata. Esta calle era llamada la “ruta del tesoro” al ser entrada, con parada en la torre de la Plata, de los caudales de oro y plata que tenían como destino final la Casa de la Contratación.
10. TORRE DEL ORO. Justo junto a este edificio se situaba el Muelle de Sevilla de donde salió la expedición, conocido también como ‘Puerto de las Muelas’ en la época de Magallanes. De allí partió Magallanes y allí regresó Elcano con esl resto de supervivientes .
11. PASEO DE MARQUÉS DE CONTADERO. Cuando Magallanes llegó a Sevilla el 20 de octubre de 1517, el Puerto en el que desembarcó era un espacio abigarrado, de enorme concurrencia, tráfico sin igual de navegantes, funcionarios, pícaros y buscavidas llegados de todas partes del reino de España y el resto de Europa esperando la oportunidad de embarcarse hacia las Indias en busca de fortuna. La salida de las expediciones suponía todo un acontecimiento en la ciudad. La industria local se volcaba en la reparación de las naves y en procurar todas las necesidades para el viaje.
12. PUENTE DE BARCAS (HOY PUENTE DE TRIANA). Por el puente transitarían las cargas destinadas a las naves de Magallanes, provisiones y útiles para la vida diaria en alta mar: ollas y caderas, toneles para el agua, aparejos de pesca, etc…
13. MERCADO DE TRIANA Y CALLEJÓN DE LA INQUISICIÓN. La fortificación almohade fue la sede de la Inquisición -de hecho, los restos que quedan del castillo acogen hoy día el centro de interpretación y museo sobre el tribunal eclesiástico- y cuando Fernando de Magallanes preparaba su viaje en Sevilla, el Santo Oficio estaba en pleno apogeo. Aunque era su sede y se usaba como cárcel, el castillo no era la única prisión asociada al Tribunal de la Iglesia, que contaba también con una prisión permanente en las inmediaciones de la Iglesia del Salvador.
14. IGLESIA DE SANTA ANA. Era la iglesia mayor del barrio marinero por excelencia.Especial atención merece en una de sus capillas la talla de la Virgen de la Victoria, una de las imágenes religiosas más vinculadas al viaje de Magallanes-Elcano.
15. PLAZA DE CUBA. En su día llamado Puerto de las Mulas, también conocido como de las Muelas. Se encontraba en la orilla opuesta a la Torre del Oro. Hoy no queda en pie ningún vestigio de aquel emblemático muelle que vio partir las cinco naos comandadas por Magallanes en dirección al nuevo mundo.