La ruta de la Cueva de los Nombres en La Pola de Gordón
La Pola de Gordón estrena ruta. La Cueva de los Nombres es un recorrido fascinante por la naturaleza, la historia y la riqueza geológica de una localidad que ha querido recuperar una recóndita gruta a la que peregrinaban los jóvenes del lugar en los años 60 para grabar sus nombres en sus paredes y que muy pocos lugareños conocían.
La Pola de Gordón ha recuperado un antiguo tesoro conocido solo por algunos vecinos de la localidad. Fue hace dos años, cuando uno de ellos, Pascual, empezó a hablar de una recóndita cueva a la que los jóvenes de la década de los sesenta y setenta acudían para pasar el rato y donde grababan sus nombres para dejar constancia de su presencia. Esa tradición se fue perdiendo con el paso del tiempo hasta que la Junta Vecinal de La Pola, el Ayuntamiento y la Reserva de la Biosfera Alto Bernesga, con la colaboración de Betula Ingenieria Medioambiental decidieron rescatar este emocionante itinerario y ponerlo en valor creando así la llamada Ruta de la Cueva de los Nombres. De hecho en este proyecto se han implicado 35 personas entre ingenieros, historiadores, carpinteros, operarios, diseñadores gráficos y un largo etcétera.
Fue el pasado 5 de julio, coincidiendo con la celebración del Día Mundial del Medio Ambiente cuando se abrió oficialmente esta ruta con la que la Junta Vecinal de La Pola quiere impulsar el turismo activo de esta localidad, que pese a tener otra ruta conocida, la de Fontañán —no apta para todos los públicos—, si que necesita un pequeño revulsivo para conseguir que los visitantes conozcan este lugar. «La filosofía del ecologismo activo pasa por mejorar la calidad de vida de las personas desde los territorios en los que se asienta», explica Beni Rodríguez, gestora de la Reserva de la Biosfera Alto Bernesga, y una de las impulsoras del proyecto.
Por eso esta ruta sale y llega desde el corazón de La Pola de Gordón, desde donde el visitante se encamina a una aventura fascinante que aúna naturaleza, historia, paisajes increíbles, toponimia y muchas cosas más.
Es una ruta circular de cuatro kilómetros, sencilla con algunos tramos de dificultad, que inicia y termina en la Iglesia de la localidad en la Calle Constitución. El acceso a la cueva de da nombre a la ruta, la de los Nombres, sí entraña algo más de dificulta, algo de lo que se advierte al caminante para que lo tenga en cuenta.
Esta ruta cuenta con una señalización y una cartelería que va mucho más allá de una mera indicación, ya que está diseñada con paneles informativos para ayudar al visitante a comprender todo lo que tiene delante, como los vestigios que la Guerra Civil Española dejó en este lugar, como las trincheras o la Cueva del Polvorín, los bosques de encinas, robles y pinos, que se entremezclan con rocas calizas, los restos de la cantera de Los Llanos donde se extrajo la piedra caliza griote para la construcción del Palacio de Gaudí de San Marcelo en León, entre otros edificios señoriales de la capital, y un impresionante mirador desde el que se aprecia todo el macizo de Fontañán, con sus picos.
Otra parte de la ruta consta de una vía ferrata diseñada por una empresa especializada.
Todo el recorrido es perfectamente realizable por todo tipo de personas, ya que es una ruta muy familiar y agradable para realizar sin dificultades. De hecho, la Asociación de Montaña Pandetrave la recomienda para que la realicen personas con discapacidad con las llamadas sillas Joëlette.