EDITORIAL | El aeropuerto necesita un liderazgo político para tomar un nuevo impulso

El alcalde de León, José Antonio Diez, se ha comprometido públicamente a promover la actividad en el aeropuerto de León no sólo para el servicio de pasajeros sino como terminal de mercancías. Las instalaciones leonesas, que han pasado por escenarios críticos antes de la captación de los vuelos del Club de los 60, necesitan que un liderazgo político le dé impulso a una situación que, con constantes altibajos, siempre bordea la precariedad a pesar de ser un puntal imprescindible para el desarrollo económico de la provincia. Pese a esta circunstancia, la presencia socialista al frente del Ayuntamiento de la capital y de la institución provincial, que conforman el consorcio que rige los destinos de las instalaciones de La Virgen del Camino, debe servir para conformar un frente común que presione a Madrid. Como el propio regidor ha reconocido, tanto el Ministerio de Fomento como Aena son imprescindibles para la promoción del aeropuerto, que ha sido el gran olvidado del pacto PSOE-UPL por la Diputación.  

La construcción de una terminal de mercancías, como propone el alcalde, tendría una repercusión decisiva para que la provincia ganara puntos como nodo logístico del noroeste, pero tampoco hay que olvidar que las instalaciones están preparadas para acoger vuelos internacionales y que, aunque la competencia del entorno es feroz, no se puede dejar de presentar batalla.