Editorial. Apuesta clara por los autónomos y con más impulso en el mundo rural

La aportación a la economía española de los autónomos es fundamental. Pero más si cabe en territorios como esta tierra donde los grandes proyectos industriales ni existen ni difícilmente se concretarán al menos en el corto y medio plazo. Con una actividad basada en el emprendimiento resulta fundamental la puesta en marcha de medidas eficaces para retener a los jóvenes y para facilitar alternativas a las víctimas de las sucesivas crisis que se han generado en sectores como la minería, el campo o la construcción. El presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, anunció ayer la implantación de una nueva tarifa plana para autónomos que será más ventajosa que la actual para facilitar el pago de los costes de la afiliación a la Seguridad Social. Se trata de una ayuda que tendrá como mínimo una duración equivalente a los primeros 24 meses, y que incluso se ampliará a 30 meses para el caso de los emprendedores de los municipios menores de 5.000 habitantes. La acción forma parte de una nueva Estrategia de Emprendimiento, Innovación y Autónomos 2021-2025, dotada con 700 millones de euros para impulsar programas de creación de empresas en torno a sectores de gran valor añadido. El propio Mañueco defendió esta semana la necesidad de que se plantee el futuro en clave de «reto demográfico» y no tanto de despoblación, en un gesto con el que busca transmitir que «lo importante es que se vayan dando pasos» para buscar respuestas y soluciones