EDITORIAL | Una Legislatura de gran inestabilidad con el paro al alza
El enredo para la formación de la Mesa del Congreso ha puesto en evidencia una vez más a los grandes partidos políticos. El tacticismo ha impedido un acuerdo transversal porque el PSOE primaba el conseguir la vicepresidencia primera a dejar fuera a Vox y el PP intentaba mimar a Ciudadanos, su compañero de pactos en numerosos lugares de España. Una vez más los egoísmos han primado en una jornada de estreno de la XIV Legislatura que exhibió un Congreso muy dividido —la presidencia se decidió por un escaso margen— y con los mismos mimbres de numeritos nada adecuados para el lugar fundamental de la soberanía popular y del poder legislativo.
La jornada de ayer mostró la doble cara de las circunstancias que vivimos. La del espectáculo partidista y mediático de quienes buscan su minuto de gloria y su puñado de votos para perseguir una cuota de poder. Y la otra realidad, la de la calle, con unas listas del paro que crecen —20.525 inscritos más en el Inem— tras un noviembre negro para el empleo, con 53.500 afiliados menos, en el peor registro desde 2013.
El informe de la Competitividad Regional en España 2019 presentado también este martes por el Consejo General de Economistas puso en evidencia que factores como la crisis de Cataluña pasan factura al conjunto del país. La situación general es muy compleja. Y esta Legislatura que arranca tiene que ser la del cambio fundamental para recuperar la senda en positivo.