Obligados a ponerse las pilas
No hay más tiempo de dejar pasar oportunidades, cometer errores que tienen un coste demasiado caro para las aspiraciones previstas y no saber resolver las situaciones importantes en los momentos claves. No es ninguna película de fantasía, sino la realidad actual de este equipo llamado Cultural. Los sueños coperos en comunión con la afición, aunque estén recientes, son ya agua pasada y han sido un paréntesis en lo que verdaderamente este equipo se juega, y eso no es otro que la competición liguera, donde la trayectoria no es nada ilusionante y las perspectivas a corto plazo están llenas de demasiadas dudas.
Los últimos partidos ligueros han sido más bien para olvidar, más que nada en el aspecto que interesa, viendo el botín obtenido. Un punto en los últimos cuatro partidos dice a las claras que algo no se está haciendo bien, y que o se reacciona ya, o la pérdida del tren es inminente y el problema empieza a presentar síntomas incurables. Sí a esto unimos que no se ha logrado marcar ni un solo gol y se han encajado cinco, la dinámica es algo preocupante y no simplemente una realidad pasajera. Toca ponerse al trabajo con las pilas cargadas y cambiar esta trayectoria negativa de la ultimas jornadas, empezando a dar sensaciones de fortaleza y solidez que miren el futuro con optimismo.
Hoy el Reino de León vivirá uno de esos partidos que sin ser decisivo, deberá ser el del reencuentro con la victoria, de cambio de dinámica y que sirva de reconstituyente como rehabilitador de un equipo destinado a metas altas. El rival, Unionistas, conjunto charro que trata de salvar la categoría viene a jugar sus bazas, y eso Aira y la plantilla deben tenerlo en cuenta con los cinco sentidos, mostrando en el campo su calidad y potencial, que verifique la categoría de esta Cultural cuyas virtudes reales están todavía por desarrollar. Los grandes equipos se distinguen de otros por saber salir adelante en los partidos importantes y crecerse ante las adversidades. Veremos sí el conjunto leonés es uno de ellos.