EDITORIAL | El empleo público, de nuevo en la incertidumbre
Apenas comenzaba a recuperarse, y de nuevo todas las dudas asaltan el futuro del empleo público. El enorme gasto estatal y autonómico que está suponiendo la crisis sanitaria, así como el coste de las medidas para sostener a empresas, empleo y familias, repercutirá más pronto que tarde en un recorte en la partida presupuestaria destinada a recuperar tanto el nivel salarial como, sobre todo, el volumen de funcionarios y empleados públicos que se redujo durante los años de la Gran Recesión. Los procesos de oposiciones que se congelaron durante varios ejercicios habían comenzado a convocarse de nuevo, y miles de aspirantes se han volcado durante meses en el sacrificio de preparar los temidos exámenes. El sueño de un empleo y un salario fijo sigue siendo la aspiración de muchos, no hay más que ver los resultados de las encuestas sobre las perspectivas de futuro de la propia Universidad.
A falta de concretar qué pasará en los próximos meses con las plazas públicas que se habían convocado y se anunciaban, lo que está claro es que parte de las oposiciones se han suspendido, y el resto están aplazadas. Como casi todo, pendientes de la evolución de la pandemia en un primer paso. Como lo que tenga que ver con el gasto público, suspendidas del hilo de un déficit desbocado que tendrá que ser atado en corto de nuevo durante años.
La desesperanza cunde entre los más de 3.000 leoneses que están preparando oposiciones. No pueden tirar por la borda el trabajo realizado, pero no saben exactamente para qué están estudiando ahora. Difícil situación.