Cultural: el colmo del despropósito
La Cultural afrontó anoche ante el Zamora en el Reino de León el segundo partido previo a su desplazamiento mañana para afrontar la fase de ascenso a Segunda División. Lo hizo, como el martes ante el Valladolid B (1-2), sin público en las gradas, lógico, y sin presencia de los medios, ni siquiera momentáneamente los gráficos, el tiempo de hacer unas fotos desde una distancia prudencial y con todas las condiciones que el club hubiera querido imponer. Pero ni por esas. Sin duda se entendería —y asumiría— que, como en el caso de las gradas vacías, fuera por razones de seguridad sanitaria. Pero no es el caso. El argumento con el que se despachó a los medios de comunicación —a los de aquí—es que Aira, el entrenador, no quería observadores de su estrategia que luego se filtrase a su primer rival, el Yeclano. Es el colmo de la estupidez, consentida además, pensar que el adversario está en casa y desde luego una manera miserable de entender el papel —y el derecho— de los informadores... los de la prensa.