Arte de mojarse
Lo importante es no hundirse. En Tarragona, un pescador de 73 años ha sobrevivido ocho horas en el mar haciéndose el muerto, hasta que fue localizado. Asombrosa resistencia la suya, con cinco años menos hubiese regresado nadando. Los pescadores son los mineros del mar, están hechos de otra pasta. A los ocho minutos este columnista ya estaría aburrido de la postura y preguntándose: “ay, madre, ¿eso que me está rozando la entrepierna es un escualo… o Neptuno se está haciendo el graciosillo con su tridente?” . Enseguida, la zozobra terminaría conmigo en el fondo. El pescador no pudo contar mucho sobre peripecia, pues se repone de la misma en un hospital. Pero sí, en su situación este servidor no habría vivido para escribirlo y ya estaría metabolizado en colesterol malo de un atún. No puedo imaginarme ocho horas flotando y haciéndome el muerto. Lo cierto es que el mar no tendría ni siquiera que hincarme el diente, el aburrimiento le haría el trabajo sucio. ¿A qué podría darle vueltas para no ahogarme de un bostezo, una vez se me hubiesen terminado las preguntas del tipo ¿me dejé la impresora encendida? o ¿nos representará este año Kiko Rivera en Eurovisión? Si no matas el rato este te mata a ti. ¿Qué balada de lobo de mar podría cantar para elevar el ánimo, si solo me acuerdo de “Había una vez un barquito chiquitito”? ¿Qué chistes me podría contar sin que la risa me haga tragar agua? Soy mal náufrago y peor aún falso muerto. ¿Y si me entran ganas de ir al excusado? En la mili, durante las formaciones era oír lo de firmes y empezar a picarme algo. Otra cosa, claro, es si naufragas con Jennifer López. De perdidos, al río. Lo admito, esto último ha sido un chiste facilón, pero soy un columnista de tierra firme y lo más que puedo hacer es chapotear un poco.
Estoy deseando leer la vivencia del rescatado. ¿Las sirenas son rubias de bote?, ¿pudo preguntar a Moby Dick si quedaba mucho para tierra firme?, ¿se topó con alguno de los náufragos que dibujaba el gran Forges?
Admitámoslo, las viejas fórmulas del sálvese quien pueda ya no funcionan, y además nunca funcionaron. Nos mintieron. En la vida tampoco puedes nadar y guardar la ropa. Solo podremos salvarnos juntos. Hay que mojarse. Mojémonos.