Una deuda con Villadangos que obliga al Gobierno a resolver con inmediatez
La compra de los activos de la desaparecida Vestas por parte de Network Steel Resources (NSR) y su implantación en el polígono de Villadangos del Páramo a través de la filial acerera Coated Solutions León supuso una oportuna solución a la grave crisis laboral e industrial y al enorme trauma social que generó el desmantelamiento y la fuga de la empresa eólica danesa y su torticera manera de afrontar la situación.
Ese proceso se resolvió con éxito gracias a la implicación del Gobierno, que movilizó en el empeño a dos ministerios, y de la Junta en un esfuerzo y una acción conjunta dignos de elogio y en un inusual ejemplo de entendimiento entre administraciones que debería ser tomado como referencia. Una de las condiciones aceptadas por las partes era la inmediata construcción de un ramal ferroviario, apenas un kilómetro, desde la propia estación de Villadangos hasta el polígono industrial que posibilitase no sólo la entrada del suministro de acero que llega a través del puerto gijonés de El Musel, sino también la salida de la producción de esa y otras empresas del sector que, encendido el horno de esa actividad, no tardaron en buscar acomodo físico y se instalaron —lo están haciendo o lo harán— en las inmediaciones.
No faltaron quienes, movidos por el recelo de la experiencia previa, pusieron en duda la viabilidad del proyecto y la utilidad del esfuerzo de las administraciones, cuestionando la viabilidad de la propuesta y dudando del compromiso de la empresa. Conocíamos ayer la alianza estratégica de NSR con un hólding de Dubái que amplía los horizontes comerciales de la acerera y que, por tanto, tiene una incidencia directa sobre la actividad industrial y laboral en Villadangos, avanzando así por delante de las propias administraciones. Ese audaz movimiento exige ahora el cumplimiento inmediato por parte del Gobierno con la ejecución de ese ramal que evite el farragoso traslado de la materia prima en camiones desde la estación de trenes a la planta de tratamiento. Porque el proyecto industrial ideado por NSR supone un espaldarazo importantísimo para Villadangos no sólo por la generación directa de empleo y riqueza, sino también por posibilidad de captación de otros ahora que se ciernen tantas dudas sobre la voluntad real de desarrollar la plataforma logística y ferroviaria de Torneros.