Curmeneiru, rapaz
M andando prensa vieja al reciclaje reparo en un Diario de 2016 abierto en una página del Bierzo con titular que pide ojear más: « Candín recupera los corrales de lobos como atractivo turístico de Ancares »... y me quedo patidifuso al contemplar la foto que acompaña mostrando un alto murete de piedra que hace un irregular redondel (30 mts. de diámetro) en una ladera de carrasca matoja, carqueixa y urz. Dice ahí su alcalde que « en todos los pueblos solía haber uno. Ahora los que se conservan en mejor estado son los de Tejedo de Ancares, Pereda y Espinareda » y que « su construcción se remonta a varios siglos atrás, cuando los habitantes de los pueblos no tenían armas de fuego para defender sus propiedades, y éstos se las ingeniaban con este tipo de construcciones para atrapar al lobo con cebo vivo ». Y añade que abrirá sendas de visita y pondrá cartelones a ese paisaje (diosmío, ¿los puso ya?) que expliquen al turista la función de esas trampas loberas. En fin, tanta tontería junta no suele verse a menudo y pasé en un instante de la estupefacción a la escojonación bendita. ¿Un chorco en cada pueblo?, ¿y así de grandes?... ¡jódete, Valdeón, que solo tienes uno y de foso canijo!, el único en León hasta que este alcalde nos descubrió un yacimiento de ellos sin salir de su municipio. Qué barbaridad. ¿Y cómo mataban después al lobo?, ¿a pedradas, con lanzas, a gritos ensordecedores?, ¿y les era fácil con un blanco tan astuto que no dejaría de moverse en carreras desesperadas y con espacio de sobra para ensayar un salto fácil de ese murete?... «¡cuánta patraña y cuánto tonto hoy dispuesto a creerse fábulas con tal de abultar su patrimonio singular... y diferencial !... en fin, el disparate se sirvió y mucho es de temer que se mantenga, aun siendo insulto a la lógica y propia historia de los pueblos», dijo Otavito en modo etnógrafo, «eso nunca podría ser un chorco, ¡qué ganas!, es solo un curmeneiru , rapaz, un colmenero», le dice a ese alcalde y le invita a pasarse por aquí mañana, que bien fácil le explicará esos corralillos que igual pudieron servirle para «corros de brujas», ya puestos.