Editorial | Desatasco parcial en Feve que sólo solventará el caos urbanístico
El Ayuntamiento de León anunció ayer que la empresa pública Adif ha licitado la urbanización del entorno de la estación de Feve, entre las calles Padre Isla, Álvaro López Núñez y Ramón Cajal. Se trata de un déficit histórico que afecta a una parte fundamental de la ciudad y en el que el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias acumula un retraso más que notable. Y lo que es peor, no sirve para salvar el verdadero problema que pasa por la supervivencia de la línea férrea, bloqueada desde hace más de una década sin que nadie aventure una fecha para su reapertura al paso de trenes.
Las obras que ahora dan un primer paso supondrán la urbanización de los terrenos próximos a la estación y el precio del proyecto es de 3,6 millones de euros. La obra ha registrado diferentes modificaciones y al final se apostó por una fórmula no exenta de polémica, ya que se incluye un vial de nueva construcción desde la zona de la calle Bilbao hacia Padre Isla, para facilitar el paso de vehículos justo al lado de Espacio Vías y rompiendo lo que en estos momentos es una amplia zona ya peatonalizada con una notable actividad consolidada, aunque ahora limitada por las restricciones de la pandemia.
En todo caso, el cambio en este barrio de la zona norte del centro de la capital supone un avance importante para suprimir un espacio caótico, que últimamente se ha hecho incluso presente en los partes de la Policía Local al detectarse allí botellones.