Editorial | El error del Ildefe agrava la debilidad de Diez con medio mandato pendiente

Este próximo miércoles se cumplirán dos años desde las elecciones municipales. Vivimos el ecuador del mandato. Y lo cierto es que, a pesar de la escasa gestión puesta en marcha entre otras cosas por el covid, los equipos de gobierno empiezan a resquebrajarse. La crisis de Ponferrada acabó en cisma y ahora la de León también se hace permanente por la presencia de una concejala, Susana Travesí, fuera del grupo de gobierno tras el frustrado nombramiento a dedo de un nuevo gerente para el Ildefe. La hasta ahora mano derecha del alcalde deja todos sus cargos y pone en evidencia la larvada grieta que existía dentro del grupo del PSOE, con un choque que iba in crescendo entre los ‘gallos’ más próximos a José Antonio Diez. Pero lo ocurrido en las últimas jornadas, —al facilitar el alcalde que estallase un conflicto subsanable paralizando a tiempo el nombramiento del compañero de Travesí— da alas a las posibles batallas internas en un equipo de concejales en el que no todos son afines a Diez, ya que siguen con mayor atención las instrucciones que da la dirección provincial del partido, a la que permanentemente se enfrenta la agrupación local, controlada desde el Ayuntamiento.

Con este panorama político, los dos próximos años estarán marcados por una debilidad que ya estaba en el origen del mandato por la victoria insuficiente de Diez. Ahora toca gobernar y recuperar la ciudad. Echará en falta una edil con experiencia como Travesí, que llevaba materias fundamentales como la Promoción Económica.

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