Tres años más

C ree Peláez que es fácil vender como audacia las cuarenta que le cantó en falsete al ministro Ábalos el alcalde de León, cansado de arrastrar en la partida de tute cabrón que al parecer se estaba jugando ahí sin tener mayor noticia de ella los espectadores del burle (los de fuera miran, callan y dan tabaco... o jabón). Estaba el burgomaestre leonés desairado porque el ministro (cuya impopularidad es redonda como su jeto y su irritante prepotencia) decidió excluir al ayuntamiento de sus visitas institucionales en León; y el alcalde, ofendido, aprovechó el momentazo de discursos y ensalzamientos para leerle la cartilla de deudas de su ministerio con esta ciudad, lo que le valió la riña y amenaza de un tal Koldo, exeskolta y hoy adlátere del ministro, tipo de chulesca torpeza convirtiendo alcaldes en Sastrecillos Valientes.

Sin embargo, dice Peláez que no acudir Ábalos al ayuntamiento fue indicación de los socialistas de aquí y asesores; el alcalde no es de la cuerda oficial y está perreado con su ejecutiva y partido, así que utilizó las demandas de esta ciudad para desquitarse del  asunto interno  haciendo pagar un desaire desairando él también en modo populíviris ladrador y mirando a la galería que jaleó el despecho por lo que tiene de hartura con tanto maltrato a León... pero nadie ignora que al marchar de aquí algo furioso el ministro y su tropa, escasito será ya el interés que pueda prestar su ministerio a todo lo que se le demandó, que lo aplazará cuanto pueda, si no lo bloquea o archiva sin más en la papelera, pues ya advirtió el adlátere al alcalde:  Me quedan tres años para joderte ... pero solo León será quien salga de ahí todavía más jodido (hostia vicaria se llama), al menos esos tres años que dice el baranda; de modo que el alcalde habrá ganado así popularidad, pero a todo lo que interesa tanto a León y es tan urgente le quedan tres años más de retambufa. ¿Aprendió su arte política este alcalde en la Escuela Morana?, ¿y qué lío interno bulle ahí?, ¿calculó el daño que habrá hecho su cosa a esos intereses leoneses que le inflaron el verbo?... astuta diplomacia.