Los alzamientos

E l de hoy, 18 de julio, fue día de Alzamiento Nacional; en realidad, seminacional, media España que se tiró a lo tremendo porque en lo democrático las tortas no pasan de insultos o amenazas y eso érale poco, empate técnico que buscó resolver a hostia sucia mejor que limpia, cosa que aún hoy aviva alguna nostalgia en bocas.

En este aniversario 85 de la gran cagada española del siglo XX (si no es cagarla infinito matarse entre compatriotas, baje Dios y lo vea) celebran los populares de León su congreso para revocarse con caras nuevas (y no tanto), pasando a menor su plana mayor, aunque con puchero y sin pucheritos, lo que se dice conformes y confortables. Y por darle runrún a la efemérides sonará en una esquina de ese congreso el alzamiento que urdió el candidato perdedor de las primarias (vergonzosamente goleado), alcalde de Villacalambres que no logró siquiera el golete de la honrilla y que, sin digerir nada bien tanta derrota, metió denuncia intentando la suspensión del congreso provincial de hoy, calzándole también a su partido querella por «delito contra la intimidad, el honor y la propia imagen y otros derechos fundamentales», un rediós en verso que él sustancia en 24.000 euros por las rozaduras; o por joder algo más a las siglas que le desdeñan, un PP que saldrá de este congreso necesitado también ahora de poner cara más rural, aunque su juego siga en lo urbano. Y con lo rural le vendrá algún leonesismo rústico, corro en el que seguramente tendrá que inscribirse la nueva plana popular (¿les valdrá un «no pero sí» como al Psoe?) para no perder comba en el rentable sentimentalismo identitario, tablón salvavidas que, a falta de programa o reputación, sirve ya a cualquier sigla que se ponga a remar en él.

Si las bicicletas son para el verano, los alzamientos son para julio, pero ¿cómo reprimir risas o lástimas viendo el Alzamiento villacalambrino por un lado y, por otro, ese ¡alza el rabo, León! que proclaman pueblos o pedanías con oportunista moción que a nada compromete, salvo al Levantamiento de una silla en la que vuelven a sentarse?...