Editorial | Garantías y dudas en el futuro del Inbiotec
La estabilidad alcanzada por el Inbiotec ha dado un respiro a su plantilla, para la que llegan garantías hacia todos los proyectos de investigación en marcha. En el corto plazo también parece superado el bache en lo relativo a los proyectos conjuntos con empresas. Pero las dudas se plantean en el medio y largo plazo sobre la situación real que vivirá el ‘nuevo’ Inbiotec. Cesefor, fundación que la absorbe, está pilotada por la Diputación de Soria y la Universidad de Valladolid. Con esa nueva estructura parece importante que se aclare el papel que retendrá esta tierra, y en concreto qué intervención se destina a la Universidad y a la Diputación leonesas, que han sido fundamentales desde su creación y para frenar el concurso de acreedores.