Editorial | Un filtro en las urgencias

La pandemia ha cambiado los hábitos de los pacientes, también en lo que se refiere a los servicios de urgencias. A pesar del descenso en el número de cartillas de la provincia, 3.000 menos en el último año, los centros de Atención Primaria gestionaron un 10% más de casos de pacientes que acuden con problemas que necesitan ser tratados con rapidez fuera del horario habitual de los médicos.

Esta tendencia se alinea con lo que en los hospitales se reclama desde hace años: acudir a esos servicios sólo cuando sea necesario. Eso permite que los profesionales de los hospitales se centren en el tratamiento de los casos más graves, mientras los que pueden ser resueltos en las consultas de Primaria se solventan con agilidad y sin colapsar las urgencias hospitalarias.