Editorial | San Marcos y el proyecto en el tintero
No hay dotación presupuestaria, ni expectativas de que esté en ciernes. La segunda fase de la remodelación del parador de San Marcos, un proyecto de 35 millones de euros, que figuraba en el Pacto por León que el PSOE firmó con UPL y que se diluye en medio de la indiferencia general. Son cinco años desde que se iniciara el proceso de reforma que afectaba, en primer lugar, a la parte histórica del monumento y que implicaba echar abajo el edificio moderno anexo que, supuestamente, iba a ser sustituido. La planificación vendida suponía que San Marcos recuperaría el esplendor que le izó como uno de los paradores más prestigiosos del país. Hoy, el proyecto se encuentra ninguneado, escondido en lo más profundo de la mochila de las promesas incumplidas, junto a otras vergüenzas que también tuvieron grandes planes que se quedaron a medias, como el Palacio de Exposiciones o el Teatro Emperador.