Paulino en su sitio
Hoy, bien de mañana, sube Paulino a su sitio, puerto de Sancenas, peñas arriba de Genicera, donde sus cenizas se aventarán junto al viejo chozo y sobre aquel pasto cervunal que durante décadas fue el pan de sus ovejas y su horizonte vital a la vista del pico Polvereda -Correcillas mal llamado- que corona esas alturas... Paulino García, el Manco en la memoria de la tantísima gente que le conoció y le recuerda desde la honra que siempre tuvo su trato y su palabra, un hombre tranquilo hecho de cepo-raíz de gorbizo para que las inclemencias de la vida no le quebraran la voluntad de atar su destino al pastoreo de sus propios rebaños, una enciclopedia pastoril y ganadera donde las haya, un hombre de talla y empeño que, si bien nació asturiano en los valles de Quirós, se hizo más leonés que nadie bien temprano sin que haya por aquí o ahí lejos cordel y cañada que no hubiera cosido con sus pasos, sus ovejas y sus perros, aquellos mastines de gran alzada y con carranca cuya cepa genética preservó, o aquellos careas vivarachos siempre atentos a la orden o a la mirada que habla, como un tal Perico al que su escudero Cándido, enjuto extremeño de mirada azul, hacía cantar a la noche.
En ese chozo de Sancenas (rehecho en memorable jornada con Vitalino purriendo, su mocerío voluntario y hasta con Ful pujando ripias de roble, premiados todos con la caldereta doctoral que sólo Paulino sabía hacer) o en el chozo inferior de Uvierzo donde concluían las veranias, pasamos noches de estío inolvidables con los nietos de Joselón y los de su hijo Pepe, y Pepín en medio, el hijo que hubiera querido, la familia de Paulino a todos los efectos y de la que Charo, Ángel y Marta fueron sus últimos valedores. Y así Paulino ha vuelto a su sitio y a vivir en las bocas de la memoria que hoy se junte en Genicera y sabiendo todos, como sabemos, que la raza pastoril de Paulino quizá muriera del todo con él, gente irrepetible, todo un mundo que desaparece, y esperemos que no lo haga su generosidad de corazón ancho y bolsa abierta y tanto saber como reunió y sembró.