Editorial | Éxito sobresaliente del talento leonés al máximo nivel continental
La noticia de que Pablo Álvarez Fernández y Sara García Alonso están en la lista de seleccionados para la exploración de Marte debe enorgullecer a la sociedad leonesa. Y también a su Universidad, el centro donde iniciaron una formación que les ha llevado a imponerse en un proceso al que acudieron más de 22.500 candidatos. Pablo —ingeniero aeroespacial— logra plaza de titular, mientras Sara —investigadora en oncología— alcanza de momento la posición de suplente. Para ambos se abre un camino realmente ilusionante y mucho más allá de lo que suele ser habitual. Participarán en las misiones que tendrán la Luna y Marte como retos de conquista. La provincia acapara de este modo la actualidad de la carrera espacial española, como quedó claro en la presentación pública de ayer en París, donde Pablo y Sara estuvieron acompañados por la ministra de Ciencia, Diana Morant. Y este momento histórico quizá sirve de algún modo de respaldo a esa Universidad leonesa, que se ha convertido en promotora y gran defensora de la candidatura local para acoger la futura sede de la Agencia Espacial Española. Parece claro que son asuntos que nada tienen que ver directamente, pero también puede plantearse que el centro de estudios leonés tiene la oportunidad de reivindicarse con total justifica en el siempre complicado y competitivo mundo de la enseñanza superior.
A Pablo y a Sara les quedan muchos retos por delante. Un largo periodo de formación y de especialización. De momento, sólo hay dos españoles que han conseguido subir al espacio. Son Pedro Duque y Miguel López Alegría. Pero los dos jóvenes astronautas que se preparan ahora para llegar al cielo no son desconocidos en León. Ambos han trabajado muy intensamente en sus especialidades consiguiendo importantes avances científicos. De ello dan buena fe los reportajes que han protagonizado en el suplemento Innova de Diario de León, que recogían los avances conseguidos por dos prometedores jóvenes que dan buena fe del éxito del talento que surge de esta tierra.