Edificio Ramón y Cajal, 33

En febrero de 1940. Juan Torbado Franco y Ramón Cañas del Río proyectaron esta Casa de Alquiler promovida por Luis Fernández Selva en la calle Ramón y Cajal, cuyas obras dirigieron con Ángel Panero como aparejador. Idearon una estructura de muros de carga en cinco crujías, la primera paralela a la calle y las demás al patio de manzana. Situaron carboneras, trasteros y almacenes en el semisótano.

En la planta baja dos viviendas y el portal con escalera de tres tramos para subir a dos niveles con cuatro viviendas más distribuidas funcionalmente: generoso vestíbulo, corto pasillo, homogéneas estancias vivideras a la calle, cocina, baño y aseo a los patios de luces, las tradicionales galerías al fondo. Dispusieron la fachada simétrica sobre zócalo horadado.

Proyectaron el cuerpo central sutilmente realzado, ladrillo visto en tonos oscuros aparejado a tizón con juntas rehundidas, ¡tan leonés!, sencilla portada en el eje y gran mirador en voladizo de dos pisos, esquinas redondeadas y amplias ventanas con carpintería de madera y persianas enrollables del mismo material entre machones revocados, barandillas de tubo y destacadas líneas horizontales de carácter decorativo, que contraponen su dinamismo al efecto ascendente de dos estrechos frentes laterales, también estucados, con remate escalonado e hileras verticales de ventanas enmarcadas por tiras de ladrillo y clave realzada… A principios de los años 40, Cañas y Torbado seguían instalados en un aparente ‘Racionalismo heterodoxo’, ‘al margen’ o ‘salmón’, tal vez por la llamada ‘inercia adquirida’, pero aquí impregnado de un discreto y refinado repertorio Art-Decó… ¡Tan elegante!... Posiblemente entendido, no solo como un estilo mezcla de vanguardia y tradición, sino también como una creencia, o una mentalidad… o simplemente como una pose, que les permitiera aplazar la asunción del nuevo ‘formalismo historicista’ amparado por la Dictadura.