Editorial | Con la suciedad no hay plazos

Los vecinos de la zona del mercado del Conde Luna exigen al Ayuntamiento una solución urgente para la acumulación de contenedores que se han convertido en un peligroso foco de suciedad. Doce recipientes incontrolados a rebosar, cuando el Procurador del Común ya ha advertido que no pueden acumularse más de tres y que deben tener en consideración la cercanía con las viviendas. Una realidad que, más allá de incumplir la exigencia del reciclaje en una zona con especiales condiciones para ello, se ha transformado en un cúmulo pestilente de porquería que ningún vecino tiene por qué sufrir. El hecho de que el mercado esté en obras no es excusa para mantener ni un día más una situación insostenible. 

Aunque sea de manera transitoria hasta que las obras concluyan el sistema de recogida de residuos previsto en la reforma, la situación exige una solución urgente. Es cuestión de salud pública.