Protagonismo para la Junta Electoral
La precampaña gana grados de temperatura cada día que pasa y está generando un singular protagonismo para la Junta Electoral, que casi a diario emite dictámenes condenando acciones que atentan contra la imparcialidad que deben mostrar las instituciones. El caso más sonado llega desde el Gobierno. A su ministra portavoz, Isabel Rodríguez, le ha llegado el martes un expediente sancionador tras dos avisos previos por hacer declaraciones «electoralistas» en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros. Pero también hubo ayer apercibimiento para la vicepresidenta tercera, Teresa Ribera, acusada de electoralismo en su pronunciamiento en Moncloa sobre Doñana. En León, la Junta Electoral impidió ayer un acto del concejal elegido por Podemos-Equo, Nicanor Pastrana.